Controla Morena las cabeceras distritales

Si bien analistas manejan diversos escenarios, y algunos pretenden hacerlo adversamente a los resultados obtenidos por la alianza Morena y el Verde este 1 de junio, lo cierto es que algo que está claro para la 4T es que mantienen su representación en las cabeceras distritales más importantes del estado.

Además de ser ciudades sedes de los distritos más relevantes con una abultada lista nominal, el control de estas cabeceras representa manejar el lugar de las decisiones políticas desde donde despachan los diputados locales, y donde los legisladores operan y tejen los acuerdos para las acciones con repercusión estatal.

De los 30 distritos, 20 están en manos de Morena y el partido Verde. De las otras diez, tres se encuentran en el recuento de votos, y pudieran incrementarse a favor del partido guinda. Estas son Papantla, Poza Rica, ambas con una muy ligera ventaja para Movimiento Ciudadano y Boca del Rio, también con mínima diferencia a favor del PAN, donde Morena cree que por las inconsistencias registradas hasta podría revertir el resultado.

Representativas, política y electoralmente, Morena conserva cabeceras como Acayucan, Santiago y San Andrés Tuxtla, Cosamaloapan, Minatitlán, Córdoba, Álamo, Martínez de la Torre, Emiliano Zapata, Alvarado, Pánuco y Tuxpan.

Con los triunfos en Coatzacoalcos y Xalapa, Morena en alianza con el Verde, estaría manteniendo el control en cuatro distritos que se establecen en ambas ciudades. Dos por cada una.

Mismo caso que sucede con Veracruz puerto, el triunfo histórico que presumió no solo Luisa María Alcalde, sino las autoridades emanadas del mismo en la entidad y los precursores de la 4T en Veracruz.

En este puerto de igual forma se asientan dos cabeceras distritales.

Y si bien se redujeron los municipios ganados, comparado con lo ocurrido en el 2021, el número de votos se mantuvo con más de un millón 70 mil sufragios, ya sea en alianza y como partido solo, apenas 100 mil menos que en la elección del 2021 cuando la 4T junto con Verde y PT, obtuvieron un millón 200 mil votos.

Y en ese proceso fueron elecciones emparejadas con diputaciones locales, no así en este 2025 que se puede decir, que las municipales hasta parecieron arrastrar a las judiciales, y en realidad, fueron unos comicios solitarios para renovar las 212 alcaldías. Pudiera ser entonces, también una explicación del por qué hubo una menor votación.

De las diez cabeceras restantes que ostenta la oposición, de acuerdo a los números del PREP del OPLE, MC tiene Zongolica, Papantla, Poza Rica y Misantla. El PRI presume Cosoleacaque, Orizaba y Perote, y el PAN, Río Blanco, Huatusco y Boca del Río, como se dijo arriba, éste último aún en disputa.

Dos cabeceras con el Puerto

Dos casos resaltan de los triunfos que en estas demarcaciones tuvo Morena. El histórico arrase en las casillas que registró este domingo en el puerto de Veracruz con una candidata idónea, con capital político acumulado y suficiente para derrocar al PAN, Rosa María Hernández Espejo.

En tanto, otro significativo triunfo se dio en Tantoyuca. Por siempre, bastión del panismo en el norte. Particularmente del clan de El Chapito, Joaquín Guzmán Avilés, quien por décadas ha impuesto y puesto a quien se le antoja en la alcaldía, las diputaciones locales y federales.

Esta vez, Morena y Verde con Roberto Francisco San Román le dieron tremenda tunda al mismo Joaquín Rosendo Guzmán, quien sufrió el efecto Yunes, y fue erradicado del control político. Los números lo dicen todo, al perder con 17 mil 370 votos por 23 mil 640 del morenista, con una diferencia de más de 14 puntos.

Así pues, el control de las cabeceras más importantes se basa en los triunfos de Xalapa, Veracruz Coatzacoalcos, las ciudades más grandes de la entidad, además de Cosamaloapan, Córdoba, Tuxpan, y Tantoyuca entre otras, que representan para Morena la influencia política y electoral con más peso que si hubiera ampliado su universo de gobiernos municipales.

Algo en lo que muy pocos han reparado, pero que, sin duda, y aun cuando debe someterse a un exhaustivo escrutinio el papel del partido, demuestra que hubo operación quirúrgica para mantener y recuperar esas posiciones estratégicas.

Y mientras los pequeños terruños se repartieron entre la oposición, Morena se alzó con la representación distrital en las dos terceras partes de los 30 distritos.