| 2024-11-14
Ante la llegada del frente frío número 9 al Golfo de México, con vientos y temperaturas en descenso, la directora del Asilo COGRA, María Teresa Mendoza Grajales, pide apoyo a los veracruzanos para que donen colchas y cobertores para los abuelos que viven ahí.
En entrevista destacó que conforme pasa el otoño y se acerca el invierno, cada vez hay menos calor y temperatura que se acerca al fresco y poco a poco al frío.
Dijo que son muy útiles los suéteres y chamarras que la población pueda donar para los habitantes del asilo.
"Nosotros, como cada año, les ponemos los suéteres que tenemos, para que se cubran y no pasen tanto frío.;No son suficientes pero más que nada tratamos de que ellos no queden expuestos a las corrientes de aire ni nada de eso, para evitar cualquier enfermedad respiratoria", explicó Mendoza Grajales.
Reconoció y agradeció el apoyo de manos altruistas que dejan en el asilo alguna colcha o algún abrigo para que los adultos mayores no pasen frío ante el interminable descenso de temperatura de aquí a enero y febrero.
La presidenta del Asilo COGRA apeló a la generosidad de los veracruzanos para que donen todo lo que sirva para que los senectos no pasen frío.
"Sí hay personas altruistas que llevan algunos sarapes, algo que les cubra del frío; y sobre todo en diciembre se conduelen de los abuelos y les llevan algún pollito, alguna colchita, cosas así.
"Les pedimos cobertores pero que sean delgados y los que son calientitos; los gruesos no, porque las lavadoras no aguantan la lavada; por eso tienen que ser de los delgados porque se pueden lavar perfectamente en la lavadora", explicó Mendoza de Infanzón.
Explicó que los cobertores delgados se venden en tiendas de telas ampliamente conocidas en Veracruz, en la zona de mercados, donde las despachan por metros.
"Se compra el rollo y se cortan los pedazos para cada abuelo y alcanzan para varios", explicó la directora del Asilo COGRA.
Ese espacio se ubica en la calle Cultura número 341esquina Murillo, en la Colonia Hidalgo y alberga o poco menos de 70 adultos mayores, entre hombres y mujeres, cuyos familiares rara vez o nunca los visitan.