Veracruz | 2024-10-20
Entre la llovizna y el cielo nublado, los locatarios del Mercado de Artesanías 'Miguel Alemán Valdés', reubicados temporalmente bajo una carpa a escasos metros de la plaza que ya está en demolición, rezan para que no decaigan sus ventas.
Mientras acomodan sus mercancías en el espacio asignado a cada locatario o locataria, sólo responden al saludo con una leve sonrisa y sacan su mercancía de unas cajas, para colocarla a la vista de los posibles compradores.
No opinan ni detienen su trabajo.
Aún no están todos los locatarios, pero nadie comenta nada y sólo juntan las palmas de las manos mientras voltean la mirada hacia arriba.
La llovizna no ayuda a que se genere gran flujo humano, pero los artesanos confían en que el panorama cambiará cuando se quite la llovizna.
A pocos metros de ahí, personal continúa sobre los escombros del ya demolido Mercado de Artesanías 'Miguel Alemán Valdés', en Insurgentes Veracruzanos, porque persiste la pared de tablas y hay que sacar los residuos de concreto para despejar el área.
La llovizna no ayuda para atraer clientes, pero los comerciantes confían en que las cosas cambiarán.