México | 2024-06-29
La tormenta Beryl se ha intensificado rápidamente, convirtiéndose en el primer huracán de la temporada y generando preocupación en varias regiones del caribe y en partes de México.
No obstante, pese al rápido desarrollo del fenómeno atmosféricos, las autoridades mexicanas no han emitido avisos de alerta generalizados para la población ante los posibles efectos del paso de Beryl.
La segunda tormenta tropical de 2024 en el Atlántico, Beryl, ha evolucionado a huracán más rápido de lo esperado.
Inicialmente, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos había previsto que alcanzara esta categoría el domingo por la noche, pero se fortaleció antes, impactando principalmente el mar Caribe y las costas de Quintana Roo.
El huracán Beryl pasó de depresión tropical a tormenta tropical y, finalmente, a huracán en pocas horas, indicando una intensificación inesperada por los expertos.
Aunque el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) asegura que Beryl no representa un riesgo directo para la mayoría del territorio mexicano, se prevén lluvias torrenciales en Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, así como lluvias intensas en Veracruz, Oaxaca y Tabasco.
Así mismo, estas condiciones podrían generar trombas marinas y oleaje de hasta cuatro metros en la Península de Yucatán, acompañado de vientos entre 60 y 80 km/h.
Particularmente en Veracruz, la interacción entre la vaguada monzónica y la onda tropical número 6 aumenta la posibilidad de desarrollar un ciclón tropical en las próximas 48 horas.
Se recomienda a la población mantenerse vigilante ante posibles inundaciones y deslaves, especialmente en áreas bajas y cercanas a ríos.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha emitido alertas de huracán para las Islas de Barlovento en el Caribe, destacando vientos destructivos y marejadas ciclónicas potencialmente mortales.
También se han emitido alertas en Trinidad y Tobago, Santa Lucía y Barbados. En México, aunque no se han emitido alertas de huracán, las condiciones adversas anticipadas exigen que la población y las autoridades locales tomen precauciones.
Según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, se espera una temporada de huracanes en el Atlántico superior al promedio, con hasta 13 huracanes previstos, de los cuales siete podrían ser de categoría mayor.
El pronóstico sugiere la formación de entre 17 y 25 tormentas con vientos sostenidos superiores a los 62 km/h.
La rápida evolución de Beryl y las condiciones meteorológicas adversas previstas subrayan la importancia de la prepararse ante una convulsa temporada de huracanas que podría sorprendernos de no estar listos.