| 2022-08-05
José Luis Segura Barragán, sacerdote de Michoacán, se refirió a las amenazas que sufrió después de una misa en Apatzingán, Michoacán por un grupo de personas armadas supuestamente de Colombia.
"Como ya estoy viejo, es mejor que desaparezca un viejo a un joven (...) Muchos me han recomendado que me vaya, no, no me voy a ir. ¿Por qué me voy a ir? Yo soy mexicano, a mí nadie me va a correr de mi tierra. ¿Qué mal hice?, ¿A quién asesiné?, ¿A quién robé?, ¿A quién violé?, ¿A qué niño le falté al respeto, anciano a o quién sea?", cuestionó el sacerdote.
Los sujetos que lo amenazaron no llegaron a interrumpir la misa, sino que ahí estaban instalados. De acuerdo con El Heraldo Radio, el sacerdote explicó que realizó un recorrido de varias horas para llegar a Apatzingán, lugar al que va cada dos meses.
"Los hechos se dieron el 22 de julio. Llegué a la misa y, mientras preparaba las cosas, entró un hombre armado. No había gente y eso le generó confusión. A la segunda llamada se metieron otras siete u ocho personas."
El religioso ofició la misa, porque los fieles llegaron y no hubo interrupción. En la misa pidió un alto para la violencia y para el acoso al clero. Cuando terminó la celebración fue cuando recibió las amenazas de los hombres armados. Las amenazas fueron hechas por el líder del grupo armado, quien dijo que eran colombianos.