Tailandia | 2022-10-06
Panya Khamrab, ex policía de 34 años, fue el encargado de la matanza propiciada en una guardería de Uthai Sawan, en Tailandia este jueves.
El expolicía, después de salir de una vista en el juzgado, fue al centro donde creía que estaba su hijo para matarlo.
No lo encontró allí, pero sacó una pistola, un cuchillo y asesinó a al menos 24 niños. El más pequeño tan solo tenía dos años.
A algunos los degolló mientras dormían. Después, regresó a su vivienda y mató a su mujer y a su hijo antes de suicidarse.
Los agentes explicaron más tarde que el pistolero se alteró cuando descubrió que su hijo no se encontraba en la guardería.
Durante la huida, atropelló a una multitud de transeúntes antes de regresar a casa, quemar la furgoneta y asesinar a su familia.
La agencia AFP ha recogido testimonios como el de Nanthicha Punchum, jefa interina de la guardería:
"Había algunos miembros del personal comiendo afuera de la guardería y el atacante estacionó su coche y mató a tiros a cuatro de ellos. El tirador derribó la puerta con su pierna y luego entró y comenzó a cortar las cabezas de los niños con un cuchillo".
La conmoción en Tailandia es inmensa tras la masacre. El primer ministro, Prayut Chan-o-cha, ordenó una investigación exhaustiva del ataque.
Los líderes mundiales también han ofrecieron sus condolencias a las víctimas. "Es imposible comprender la angustia sufrida", escribió en Twitter el líder australiano, Anthony Albanese.
El último tiroteo masivo en el país del Sudeste Asiático data del año 2020, cuando un soldado fue abatido luego de quitarle la vida a 29 personas y dejar 52 heridos después de atrincherarse en un centro comercial durante 18 horas.
/pn