Inglaterra | 2024-04-30
Una importante polémica surgió cuando se confirmó que la vacuna de las más usadas y pedidas durante los momentos más difíciles de la emergencia sanitaria del Covid-19, AstraZeneca reconoció que sus dosis generaban trombosis, sin embargo, se explicó que no era algo común.
AstraZeneca reconoció ante tribunales del Reino Unido que su vacuna contra el Covid-19 puede desencadenar el síndrome de trombosis con trombocitopenia en casos extremadamente raros.
Se trató de una declaración judicial luego de una demanda colectiva presentada por personas que afirman haber sufrido efectos adversos graves luego de recibir esa inyección.
El medio británico The Telegraph publicó que acorde a las nuevas investigaciones habría compensaciones de hasta 125 millones de dólares para los demandantes.
Primero, el laboratorio insiste en que, a pesar de estos riesgos extremadamente bajos de efectos adversos de gravedad, los beneficios concretos de la vacunación superan los efectos secundarios que no eran la norma general en toda la población..
No es la primera vez que habla de ese lado B de sus inyecciones. En un estudio publicado en 2021 en la revista científica The Lancet, científicos del equipo que desarrolló la vacuna ya habían señalado la existencia de casos muy raros de TTS después de la inmunización.
La vacuna en cuestión -a diferencia, por ejemplo, de la de Pfizer, con tecnología de ARN mensajero, o la rusa Sputnik, que se preparó con adenovirus humanos- es en base a un adenovirus de chimpancé como plataforma. Una vez en el cuerpo, el organismo genera la respuesta inmunitaria a ese antígeno sin causar enfermedad.
En dos dosis, AstraZeneca probó una eficacia de entre el 85% y el 90% contra la enfermedad sintomática.
Se observó es que había aumento de anticuerpos contra un componente de las plaquetas, y que esto favorecía la agregación y la formación de coágulos de sangre. Se vio en pacientes que habían tenido esta trombosis con trombocitopenia (no en quienes no tuvieron el cuadro
La trombosis es la formación de un coágulo de sangre (con bloqueo parcial o completo) en un vaso sanguíneo que impide que la sangre fluya de manera normal a través del sistema circulatorio. El vaso afectado puede ser cualquier vena o arteria.
La coagulación de la sangre es la primera línea de defensa del cuerpo contra el sangrado. Cuando nos lastimamos, nuestro sistema de coagulación forma una especie de tapón o sello para protegernos de perder demasiada sangre.
Nuestros cuerpos a menudo descomponen el coágulo después de que nos hemos curado, pero a veces, los coágulos se forman de manera inapropiada o no se disuelven después de una lesión. Un coágulo de sangre que se forma y permanece en un vaso sanguíneo se llama trombo.
Una vez formado, un trombo puede ralentizar o bloquear el flujo sanguíneo normal, e incluso desprenderse y viajar a un órgano. Un coágulo que viaja como parte de la circulación sanguínea se llama embolia.