Berlín | 2020-09-01 | Agencia AFP
La tía del niño sirio Aylan Kurdi, cuya foto se convirtió en 2015 en el símbolo trágico de la crisis migratoria, llamó este martes al mundo a "no cerrar los ojos" ante el drama de los refugiados.
"No podemos cerrar los ojos y darles la espalda" a los refugiados, señaló Timda Kuri en el marco de una conferencia de prensa de la ONG alemana Sea-Eye, en Ratisbona (suroeste de Alemania).
"La gente en todas partes del mundo continúa sufriendo e incluso ha empeorado la situación (...) Piden ayuda", añadió, en la víspera del quinto aniversario de la muerte del niño, encontrado ahogado junto a su hermano y su madre en una playa de Turquía, cerca de Bodrum.
El 2 de septiembre de 2015, la fotografía del cadáver del pequeño sirio, de 3 años, que intentaba junto a sus padres y hermano llegar a la isla griega de Kos, provocó enorme conmoción en el mundo, arrojando una cruenta luz sobre el drama de centenares de miles de refugiados, sobre todo sirios, que huyen de la mortífera guerra en su país.
Aylan Kurdi se ahogó con su hermano mayor Galip y su madre Rehanna cuando su bote neumático se hundió en medio del Egeo. Solo el padre, Abdulá, sobrevivió al naufragio de la precaria embarcación.
Como centenares de miles de sirios, la familia Kurdi huyó de la guerra que ensangrienta su país desde 2011 y del avance del grupo Estado Islámico (EI) en la región de Kobane donde vivía.
"La seguridad y la esperanza"
Habían "decidido tomar el riesgo (...) de ir a algún lugar donde encontrarían, pensaban, la seguridad y la esperanza", señaló la tía de Aylan, en la conferencia de prensa.
"El 2 de septiembre de 2015 me informé de la trágica noticia: mi cuñada y mis dos sobrinos se habían ahogado", dijo con la voz entrecortada por la emoción, hasta el punto que interrumpió su relato.
"La foto de mi sobrino, Aylan Kurdi, el niño tirado en la playa, estaba en todos los medios del mundo entero. Y ese día, durante la primera llamada telefónica con mi hermano Abdulá que perdió a toda su familia (...), él me dijo: 'la foto de mi hijo es un llamado al despertar del mundo'", agregó esta mujer nacida en Siria y que vive desde hace tiempo en Canadá.
"Tragedia"
"Nuestra tragedia es desgraciadamente la de muchos otros", subrayó Tima Kurdi. "Decidí hacer escuchar mi voz a nombre de quienes sufren y no tienen voz. Y me dije: 'si no pude salvar a mi familia, entonces salvemos las de los otros'".
Tima Kurdi participará el miércoles, por el quinto aniversario de la muerte del niño, en una manifestación en Berlín por iniciativa de Sea-Eye. Otras conmemoraciones también están previstas en varias ciudades de Alemania, especialmente en Colonia y Hamburgo.
La Unión Europea experimentó en 2015 un flujo importante de migrantes por la vía marítima del Mediterráneo.
Según la Organización internacional para las migraciones(OIM), en ese año fueron más de un millón los migrantes, de los que más de 850.000 llegaron por Grecia, provenientes de Siria (56%), Afganistán (24%) e Irak (10%).