Veracruz | 2023-12-03
Enoteca Van Eyck alberga en un ala de su sala privada la exposición de pintura ‘A mi manera... recordando a Vermeer’ de Carlos Barró, que inauguró el pintor a finales de noviembre.
Acompañado de familiares, amigos y colegas, como la maestra Ivonne Moreno Uscanga, quien participó en la apertura de la muestra, el pintor compartió la serie que evoca al artista neerlandés, definido como el pintor de lo tranquilo, lo silencioso, cotidiano e iluminado.
Así, Barró exhibe diez cuadros inspirados en el pintor barroco, a la par de dos piezas de evocación personal, sobre las cuales conversó amablemente con Galería.
“Tengo una hija que radica en Bruselas, Bélgica y me invitó de vacaciones. Como me gusta la pintura, me dijo: ‘Papá, quiero que vayamos a Holanda, te va a gustar el Museo Nacional de Ámsterdam (Rijksmuseum)."
"Vi la pintura de ‘La lechera’, una obra excelsa de él y ‘La joven de la perla’ y estuve extasiado viendo esas obras”, relató.
Ingeniero por profesión, pero pintor por vocación, Barró es pintor autodidacta que ha perfeccionado su arte a través de cursos de forma independiente. La obra que comparte en la enoteca veracruzana cuenta con diez piezas en las que el óleo es el protagonista.
“En Vermeer encontré su gran maestría. Si usted ve una pintura original de él, no le ve un solo trazo. Era de una finura que nadie lo ha alcanzado, ni el mismo Rembrandt”, señaló el pintor sobre el artista neerlandés, quien comparte nacionalidad con el mencionado.
En ese tenor, el expositor señaló que su toque en la obra se encuentra precisamente en los trazos, ya que combina pincel con espátula, “algo que jamás hubiera optado” Vermeer, ya que su principal instrumento fue el pincel.
Cabe resaltar que la exposición cuenta con cuatro obras que evocan a las iconicas de Vermeer, entre las que se encuentran ‘La hilandera’, ‘La joven de la perla’ y ‘La tasadora de perlas’: “Son las que más me han impactado”, afirmó el pintor.
Figura del barroco holandés, Johannes Vermeer reflejó escenas de la vida cotidiana, interiores de hogares de la burguesía holandesa, entre otros aspectos, como objetos y algunas figuras.
De acuerdo con el sitio web de Historia-Arte, se cree que el pintor -quien tuvo once hijos y fue marchante del arte- no vivió de la pintura.
Sin embargo, sus peculiares pinceladas densas y pastosas, que “llenan todo con una iluminación que no solo da un increíble realismo, sino que realza el efecto de intimidad e incluso misterio”, definieron su arte, que inició en los años 1650.
‘Muchacha leyendo una carta frente a la ventana’ (1657), pintura que ocultaba a otra pintura; ‘La callejuela’ (1658), uno de los tres cuadros donde el pintor refleja el cielo y ‘Vista de Delft’ (1661) es una de sus obras maestras.
Así como ‘Mujer leyendo una carta’ (1664), ‘El arte de la pintura’ (1666), ‘El astrónomo’ (1669) y ‘La encajera’ (1669), son otras de sus pinturas reconocidas.
Serán dos meses los que permanezca la exposición del pintor en la Enoteca Van Eyck, que celebró la novena edición de su Verbena del Vino Mexicano el pasado fin de semana.
Carlos Barró, actualmente comparte obra en su natal Comitán, Chiapas y cuenta con más para exponer. Asimismo, alista una serie sobre el jazz, la cual constará de doce piezas y en “una técnica muy diferente.”
“Ya tengo algunas sobre músicos del jazz, algunos con sus instrumentos”, comentó el artista a Imagen de Veracruz.
Finalmente, extendió la invitación a conocer la obra, la cual se encuentra en venta, a la par de seguirlo a través de sus redes sociales, donde se encuentra en Facebook bajo su nombre.