Veracruz | 2024-06-08
Ayer en México se celebró el Día de la Libertad de Expresión, fecha establecida desde 1951 por el Gobernador Miguel Alemán Valdés y directivos de medios de comunicación. La fecha permite, replantear la importancia de la libertad de expresión, la cual es fundamental para el ejercicio de otros derechos humanos y es un indicador clave de la salud democrática de una nación.
En México, este derecho es protegido por el artículo 06 de la Constitución, el cual garantiza que toda persona puede expresar sus ideas sin ser objeto de abusos de autoridad o agresiones o bien sin ser procesado por ello, salvo en los casos en que -dice la norma- ataque la moral, los derechos de terceros, provoque algún delito, o perturbe el orden público.
Lamentablemente a pesar de su importancia, la libertad de expresión en México enfrenta retos considerables. Los periodistas y comunicadores a menudo operan en un entorno peligroso y hostil. México es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, con numerosos casos de agresiones, amenazas y asesinatos.
Organizaciones como Reporteros Sin Fronteras y Artículo 19 han documentado estos incidentes y abogan constantemente por la protección de los periodistas y el cese de la impunidad. En esta semana que concluyó, diversas organizaciones y medios de comunicación han aprovechado para reflexionar sobre los avances y los retrocesos en materia de libertad de prensa.
Hay que referir que a medida que México celebra este día, es crucial recordar que la libertad de expresión es una conquista diaria. Los avances tecnológicos y el surgimiento de nuevas plataformas digitales presentan tanto oportunidades como desafíos para el ejercicio de este derecho.
En un mundo cada vez más tecnológico, la lucha por la libertad de expresión requiere un esfuerzo colectivo y continuo, no solo para preservar el derecho a informar y ser informado, sino para garantizar que este derecho se ejerza en un entorno de respeto y seguridad.
Hay que reiterar que la libertad de expresión es un derecho esencial de cualquier régimen democrático. Si este derecho es aniquilado, la democracia estaría en riesgo latente. El ejercicio pleno de este derecho genera las condiciones adecuadas para que periodistas, medios de comunicación y ciudadanía en general puedan hacer uso de ella en condiciones de seguridad.
La libertad de expresiónes la piedra angular de cualquier democracia fuerte y sana. En México, defender este derecho es esencial y preponderante para garantizar un futuro en el que la justicia prevalezca y la progresividad de los derechos humanos sea una realidad. Difundamos y defendamos nuestro derecho humano a expresarnos libremente.