Apenas el lunes pasado, damos cuenta en este espacio sobre el grupo de delincuentes que operan en la Sonda de Campeche y asegurábamos que era una emergencia desatendida.
Estos "piratas" modernos ya no sólo atracan las instalaciones petroleras, llevándose costosos equipos, sino que ahora están vaciando cuentas bancarias de trabajadores petroleros en asaltos que se efectúan en mar abierto, esto de acuerdo con el inspector Enrique Lozano Díaz, de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF).
Datos recientes aseguran que la Secretaría de Marina (SEMAR) ha identificado que algunos de estos "piratas" operan desde puntos clave en la costa tabasqueña, particularmente desde la Barra de Tupilco, en Paraíso, y la Villa de Sánchez Magallanes, en Cárdenas.
Estos sitios se han convertido en bases estratégicas para las bandas criminales que atacan a plataformas y embarcaciones en la Sonda de Campeche, causando pérdidas millonarias y poniendo en riesgo la vida de los trabajadores.
La Barra de Tupilco, una pequeña ranchería en la Chontalpa, y Sánchez Magallanes, una villa ubicada en una península que separa el Golfo de México de la Laguna del Carmen, presentan desafíos geográficos que favorecen las actividades ilícitas de estos piratas modernos.
Estos grupos delictivos aprovechan la relativa falta de infraestructura y vigilancia en estas áreas, usando las lagunas, ríos y esteros como rutas para transportar armas, equipos y el botín robado de las plataformas y petroleros.
Ante esta amenaza creciente, SEMAR ha desplegado un operativo especializado para tratar de frenar la piratería en el Golfo de México.
La estrategia incluye patrullajes aéreos y marítimos mediante helicópteros Panther, embarcaciones Defender y una patrulla oceánica. Además, unidades de infantería patrullan las costas a bordo de camionetas, cubriendo tanto el área marítima como terrestre para identificar y detener a estos criminales.
Este operativo no sólo busca capturar a los responsables, sino también disuadir a futuros grupos que pretendan dedicarse a estos actos de piratería. Sin embargo, el éxito de esta misión enfrenta serios obstáculos debido a la extensión de la zona de riesgo, los recursos limitados y la sofisticación con la que operan los criminales.
Estas bandas, se asegura, suelen utilizar embarcaciones de alta velocidad, lo que dificulta su persecución y captura en alta mar.
Los ataques de estos piratas no sólo tienen repercusiones económicas significativas, sino que también afectan directamente a los trabajadores del sector energético, quienes a menudo son despojados de sus pertenencias y del salario que ganan tras jornadas arduas y riesgosas.
Estos atracos representan una doble pérdida: la económica, que afecta a Pemex y sus empresas contratistas; y la moral, pues los trabajadores deben lidiar con la incertidumbre y el miedo de ser atacados.
Este problema de inseguridad en la Sonda de Campeche se suma a otros desafíos en el sector energético, desde las dificultades de inversión hasta los problemas estructurales de Pemex.
Ayer mismo se remarcaba que la empresa petrolera del país acumulaba pérdidas del doble en los últimos años de operación.
Cada incidente de piratería en la región afecta la producción y genera pérdidas que suman millones de pesos. Además, estas acciones merman la confianza de empresas internacionales, afectando la competitividad y la capacidad de atracción de nuevas inversiones para el sector energético nacional.
Para hacer frente a este fenómeno, resulta imprescindible que las fuerzas federales y locales trabajen en coordinación, diseñando estrategias de seguridad integrales que incluyan tanto la vigilancia marítima como el control de posibles puntos de origen de estos criminales en la costa.
La SEMAR ha dado un paso importante con este despliegue, pero es necesario redoblar los esfuerzos y contar con mayores recursos tecnológicos y humanos.
La piratería en la Sonda de Campeche es una amenaza seria que México debe abordar con firmeza y rapidez.
La seguridad de los trabajadores, la estabilidad económica de la región y la reputación del país en el ámbito energético dependen de ello.
La Asociación de Industriales del Estado de Veracruz Región Sur (AIEVAC) y el Grupo Financiero Monex invitan para hoy a un webinar fundamental para el sector químico y petroquímico mexicano ante las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, el evento político más disputado en la historia reciente de ese país.
Las elecciones del 2024 proyectan un resultado cerrado entre la candidata demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump, lo que intensifica la incertidumbre y añade complejidad a la planeación financiera de las empresas.
Con importaciones anuales que superan los 40 mil millones de dólares en materias primas y 1.3 millones de toneladas provenientes de Estados Unidos en la región sur de Veracruz, el impacto de esta elección en el tipo de cambio del dólar será clave para la industria.
Las empresas del sector enfrentan un entorno donde el costo y la volatilidad cambiaria exigen un enfoque estratégico.
El Subdirector de Derivados de Banco Monex, José Damián Vera Quesada, será el ponente de esta sesión. Reconocido como un experto en estrategias de cobertura y previsión cambiaria, Vera Quesada brindará un análisis en profundidad y consejos prácticos para ayudar a las empresas a prepararse ante los posibles cambios económicos.
Este webinar se realiza hoy a las 17:30 de la tarde.
Contáctanos:
joluperezcruz@hotmail.com
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |