Críticas le valen “un comino” a Paquita la del Barrio

En época difícil como la que vivimos, declaraciones como la que acaba de hacer Paquita la del Barrio a un medio de Xalapa, reconfortan y motivan a la reflexión sobre cómo debe tomarse la vida sin mayores complicaciones.

Entrevistada sobre su precandidatura a diputada local por el distrito de Misantla, postulada por Movimiento Ciudadano, la señora no se muere por llegar al cargo ni, anticipadamente, hace una tragedia si no gana.

Le declaró a la reportera Claudia Montero que ha vivido demasiado y ha sido muy afortunada, por lo que no le afecta si logra o no su próximo proyecto poli´tico(alcalorpolitico.com). Pregunto cuántos políticos pueden decir lo mismo, que incluso buscan llegar al poder apoyados por grupos porriles, golpeadores.

La cantante nativa de Alto Lucero recibió críticas porque además de que no es política, menos política tradicional (no viene de la era dinosáurica priista), no tuvo ningún empacho en declarar que no sabe nada de política, aunque se defendió diciendo que nadie nace sabiendo.

Eso y el hecho de que en abril próximo va a cumplir 74 años de edad mereció que algunos la descalificaran. Su respuesta muestra el buen ánimo con el que toma las cosas. “Me valen un comino, ya he sufrido mucho como para que una habladuri´a ma´s no la aguante, ¡no, hombre! Que hablen, ya me echare´ unas a su salud”, dijo entre risas.

Pues sí. Cuando se está seguro de uno mismo, no afecta lo que digan los demás. ¡Y vaya si ella lo está! Es una mujer que no obstante su origen humilde (recordó que de niña acompañaba a una tía a vender pan) triunfó hasta convertirse en un ídolo del público mexicano.

Por eso dijo que aguantará todas las críticas que le hagan.

Quién sabe si va a ganar en la elección, pero al menos ahora como precandidata piensa en la gente de su distrito que, dijo, le ha mostrado cariño desde siempre, pero que no tiene recursos para comprar un boleto y asistir a sus conciertos.

“Me vino la idea y digo, me imaginaba estar con un pu´blico de pura gente humilde y yo canta´ndoles y lo estoy logrando, me siento feliz y la gente lo ha recibido de maravilla”. Comentó que en las localidades que visita ofrece dos o ma´s canciones a quienes asisten, solo por el gusto de darles un buen momento.

Cuán cierto es lo que dice. Verla actuar, escucharla, cuesta, lo mismo si se va a un palenque que a un concierto. Su actuación es lo mejor que tiene, sus canciones, su interpretación, su riqueza, y la está compartiendo en forma gratuita, regalándola, al electorado.

Todavía no es época de campañas, ella es solo precandidata, pero que forma de hacer campaña sin que la acusen de que la está realizando, pues quién puede señalarla, acusarla, de que porque está haciendo lo que mejor sabe hacer, cantar, anda haciendo proselitismo político, y sin embargo lo está haciendo.

Sin duda, su participación refresca el ambiente político y enriquece el escenario electoral. Se sale de lo tradicional, del discurso demagógico y regala su actuación, que, ¿alguien lo duda?, ayuda, así sea por momentos, a mitigar los efectos de las crisis que se viven.

Mujer de pueblo, que en sus canciones refleja, retrata el sentimiento popular, con sus declaraciones, con sus palabras sencillas, con expresiones que todos conocen y utilizan, nos recuerda también que la vida es para disfrutarse, no para complicársela. Que lo negativo nos debe valer un comino. Cómo no.