Boca del Río | 2024-09-17
Este 17 de septiembre, un usuario de redes sociales compartió una publicación en la que aseguró haber devuelto la figura del Niño Jesús que fue robada de la iglesia de Santa Ana en Boca del Río.
Acompañando la imagen de la figura, el usuario escribió: "Somos más los buenos, ya regresó a donde pertenece. Lo acabo de dejar hace un rato... en buenas manos"
Este mensaje ha generado gran expectativa entre la comunidad religiosa y los habitantes de la zona, quienes desde el momento del robo se han mostrado preocupados por la desaparición de la figura, traída desde la Gruta de Belén.
Aunque hasta el momento no se ha podido verificar la veracidad del mensaje ni confirmar la ubicación actual de la figura, la publicación ha brindado una señal de esperanza en medio de la incertidumbre.
El robo de la figura del Niño Jesús fue reportado inicialmente el mismo 17 de septiembre por la iglesia de Santa Ana, ubicada en Boca del Río.
La imagen fue sustraída de la Capilla del Santísimo Sacramento, junto con otros objetos religiosos, lo que generó indignación entre los feligreses.
La comunidad local rápidamente organizó una campaña de difusión en redes sociales para intentar localizar la figura.
Según informes, el responsable del hurto ya ha sido detenido por las autoridades. No obstante, antes de su captura, el ladrón habría vendido la imagen, lo que dificultó su recuperación inmediata.
En ese sentido, la iglesia hizo un llamado a quienes pudieran tener información sobre el paradero de la figura, solicitando su colaboración para devolverla a su lugar original.
El robo de la imagen causó una profunda tristeza en la comunidad, ya que el Niño Jesús no solo tiene un valor simbólico, sino que también es considerado un objeto milagroso para muchos de los fieles.
Los habitantes de Boca del Río han seguido de cerca el caso, con la esperanza de que la figura pueda ser devuelta a la iglesia.
Si la publicación compartida en redes sociales resulta ser verdadera, representaría un importante gesto de buena fe y reconciliación para la comunidad, devolviendo una pieza clave del patrimonio religioso y emocional de la iglesia de Santa Ana.