| 2024-06-16
En el Día del Padre, los cafés y restaurantes del centro histórico de Veracruz y sus alrededores no se vieron repletos de comensales, salvo el que está por el Malecón de Veracruz, donde las personas ya están acostumbradas a permanecer en fila hasta que se desocupe un lugar.
La Macroplaza del Malecón sí estaba llena de caminantes, curiosos por ver a los buscadores de monedas, quienes no se arrojaban al mar porque nadie les lanzaba ninguna.
Los visitantes deambulaban en espera de que algún intrépido sacamonedas se arrojara al mar, pero nadie lo hacía.
Otros preferían abordar el tranvía para llegar a la fortaleza de San Juan de Ulúa y conocer el sitio donde estuvo preso el mítico Jesús Arriaga o Chucho 'el Roto'.
Los viajeros que prefirieron probar un café lechero tuvieron el plus de la jarocha, quien bailó al son que le pusieron los jaraneros mientras los turistas de daban vida.
Lo que ayudó a los turistas fue que pasado el mediodía el cielo se nubló y la temperatura descendió ligeramente.
Varios papás prefirieron salir del centro histórico y moverse hacia los cafés, bares y restaurantes en la zona de playas y hacia la conurbación con Boca del Río, en busca de emociones más fuertes.