Veracruz | 2024-08-08
Entre temperaturas calcinantes y aguaceros torrenciales del verano costero las mascotas, sobre todo perros, subsisten en azoteas o en patios, a la intemperie, sin agua ni comida, a veces amarrados y sin poder resguardarse del sol ni de la lluvia, denunció Alfonso Cruz Hernández, voluntario del Albergue La Roca.
Al retomar fotografías de las redes sociales en las que se exhibe lo que consideró crueldad contra los perros, dejó en claro que ese maltrato no es novedad: siempre ha existido, pero antes no se hacía público ni se denunciaba ante la sociedad.
"Siempre ha existido; ahora hay más reportes en redes sociales y son más evidentes, pero si nos damos una vuelta por algunas colonias, hay muchas casas donde tienen perros hasta en la azotea y la verdad, los que se ven al frente, pero hay gente que los tiene en la parte de atrás, que no se ve.
"Los reportes los hacen los mismos vecinos porque se escucha que ladran, aúllan, y los dueños no acuden a verlos o van a verlos cada 2 a 3 días; ellos piensan que dejándole un bote con agua... no piensan que la lluvia contamina el agua.
Desgraciadamente los reportes los hacen ahí, como para que uno los rescate", señaló Cruz Hernández.
El voluntariado del Albergue La Roca dijo que generalmente los animales están encerrados y nadie puede meterse en una propiedad ajena.
El voluntario de La Roca dejó en claro que la ley no faculta a las personas a introducirse en una propiedad privada.
"Algunos rescatistas de hueso colorado a veces se arriesgan a abrir la reja principal para que salgan los animales y nadie sabe y nadie supo; eso se ve muy seguido por los mismos reportes en redes sociales, ahora se visibiliza más, porque a cualquier colonia que vayas vas a ver perros en azoteas, y ésos son los que se ven. ¿Y los que no se ven? Y los dueños, cuando un perro se muere lo amarran y lo sacan en una bolsa", lamentó Cruz Hernández.
Alfonso Cruz resaltó la importancia de trabajar con niños e inculcarles el defender a los animales, para que ellos sensibilicen a sus padres.
"Hay que trabajar con los niños porque ellos mismos enseñan a los papás: 'no papá, no le pegues al perrito', ellos nos enseñan de alguna manera. Yo creo que los niños pueden ayudar porque educan a los papás", puntualizó el voluntario de La Roca.