| 2024-04-16
La emigración de marinos mexicanos hacia Europa y Asia no se detiene, y no todas tienen un desenlace trágico, también hay casos de éxito, afirmó Enrique Lozano García, inspector de la Federación Internacional de Trabajadores Marítimos (ITF).
Aclaró que esa emigración no termina porque a falta de empleo en México, quienes estudiaron la carrera de Marino Mercante buscan oportunidad en el extranjero para ejercerla, a sabiendas de los riesgos que corren en algunos países del Medio Oriente y África.
"Continúan emigrando porque a algunos no les gusta el trabajo de estar aquí en las plataformas; hay algunos que sí lo traen en la sangre, que quieren navegar, andar en el extranjero pues para eso estudia uno.
Se van a embarcaciones de altura y bien pagados, con buenas prestaciones; siempre estará el peligro al no tener un contrato avalado, pero son empresas serias, de los mismos árabes de por allá, que les pagan puntual y cumplen, les mandan su boleto de avión, etcétera", explicó Lozano García.
Recordó que al desaparecer la Marina Mercante Mexicana, que tenía buques como Transportación Marítima, los trabajadores empezaron a emigrar en busca de mejores condiciones de vida.
Dijo que muchos mexicanos trabajan en el Golfo Pérsico, en Dubai y Singapur, y varios tienen años como marinos, superintendentes, pero admitió no tener una cifra.
Resaltó que esas personas no están en malas condiciones, sino todo lo contrario.
"No, claro que no, de hecho hay algunos que pasan años. He sabido de uno que se quedó a vivir en Alemania y otro en Canadá; conocen a alguien de por allá y cambia su vida y ya se quedan.
"Con los nuevos convenios y las reglas internacionales han disminuido los buques subestándar, que así se les conoce, buques deficientes; solamente los encuentran en lugares donde no hay tanta seriedad, como en puertos de África, Asia", dijo el inspector ITF.
Añadió que otros trabajan en yates, por ejemplo 2 conocidos suyos en Italia y otro en Estados Unidos (Miami), así como en Cancún y otros sitios turísticos.
Recalcó que no todas las historias de marinos mexicanos tienen un final trágico y también hay historias de éxito porque son profesionales, con formación académica y experiencia.
Hizo hincapié en que debe continuar la lucha contra la piratería y la explotación de marinos mercantes mexicanos en el extranjero.
Admitió que el estado rector, las Capitanías de Puerto a través de los inspectores y de reglamentos internacionales cada vez están más fuertes para luchar contra los piratas porque son una competencia desleal para las empresas que sí cumplen.
"No todo es malo, pero andar en ese tipo de vida siempre es riesgoso", concluyó Lozano García.