Veracruz | 2022-03-02 | Heladio Castro
Al iniciar la Cuaresma el obispo de la Diócesis de Veracruz, Carlos Briseño Arch exhortó a la ciudadanía a no reducir el ayuno al simple hecho de privarse de la carne, sino a voltear hacia el prójimo y dedicarle más atención y apoyo.
Con el Miércoles de Ceniza las parroquias iniciaron la imposición de ceniza a sus feligreses, no en la frente sino en la cabeza, como medida sanitaria en la pandemia del coronavirus.
En la Catedral de Veracruz el obispo dijo que el llamado del Papa Francisco a los fieles es a renovarse cada uno a compartir más de sí mismo con los demás; y a orar y pedir por la paz del mundo y de las familias.
Dejó en claro que el verdadero ayuno no se limita al simple hecho de no consumir algún producto en particular, sino a dejar las actitudes personalistas y a mirar más hacia el propio entorno y quienes forman parte de él.
"Este ayuno, a veces te privas de cosas, por ejemplo el papá que en vez de llegar a ver la televisión se pone con sus hijos a estar con ellos; la mamá, en vez de irse por ahí, atiende un poco más a sus hijos, platica con ellos; los hijos, en vez de estar viendo todo el día la televisión, se dedican a estudiar y ayudar en las labores de la casa.
"Ésas son formas de ayunar, de oración y de limosna, de fondo; es tratar de mejorar nuestra vida de cada uno de nosotros, buscar de qué manera podemos hacer las cosas mejores para hacer más felices a los demás, que al final de cuentas, cuando nosotros logramos la felicidad de los demás logramos nuestra propia felicidad", subrayó Briseño Arch.
En el Miércoles de Ceniza se programaron 3 misas en la Catedral, a las 8:00 de la mañana, las 12:00 del día y a las 7:00 de la noche, además de la imposición de ceniza cada hora a los feligreses.
El obispo de Veracruz recalcó que el ayuno es durante toda la Cuaresma, y recomendó pedir para que se acabe la violencia en el mundo.
El Viacrucis sí se realizará, pero más en corto, sin multitudes.
Los feligreses acudieron a recibir la ceniza a lo largo del día.
/pn