| 2024-11-07
En Veracruz, la multa por acelerar en la luz amarilla del semáforo está clasificada como infracción tipo B y equivale a 10 Unidades de Medida y Actualización (UMA), lo que corresponde aproximadamente a 1,086 pesos.
Sin embargo, si el pago se realiza dentro de los primeros cinco días hábiles, aplica un descuento del 50%, reduciendo la cantidad a 543 pesos
El pago se puede realizar en la Dirección de Tránsito ubicada en Veracruz y en las oficinas municipales en Boca del Río.
Acelerar cuando la luz del semáforo cambia a amarilla es un comportamiento común entre conductores, y se observa con frecuencia en muchas ciudades. Este hábito, llamado a veces "interceptar la luz amarilla", ocurre porque algunos conductores interpretan el color amarillo como una señal para pasar rápidamente antes de que el semáforo cambie a rojo, en lugar de reducir la velocidad.
Estudios de comportamiento vial indican que esta práctica puede estar motivada por varios factores, como prisa, impaciencia o falta de entendimiento de que la luz amarilla en realidad indica que se debe preparar para detenerse.
Acelerar en amarillo no solo aumenta el riesgo de accidentes, sino que también contribuye a la congestión en las intersecciones, ya que los conductores que intentan "ganar la luz" pueden obstaculizar el flujo del tráfico.
En muchas ciudades, esto es una infracción y, como en Veracruz, puede resultar en una multa para desalentar esta práctica y mejorar la seguridad vial.
Acelerar en luz amarilla puede provocar accidentes. Este comportamiento incrementa el riesgo de choques en las intersecciones por varias razones:
Confusión con otros conductores: Al acelerar en amarillo, otros conductores o peatones que están esperando cruzar pueden interpretar que el cruce está libre, lo que aumenta el riesgo de colisiones.
Reducción del tiempo de reacción: La luz amarilla se coloca para advertir que el semáforo cambiará a rojo, dando tiempo para frenar de manera segura. Acelerar reduce el margen de tiempo de reacción en caso de que otros conductores frenen de repente.
Incremento en el impacto de choques laterales: Cuando un vehículo acelera en amarillo y otro comienza a avanzar al ver la luz verde en la perpendicular, puede producirse un choque lateral, uno de los tipos de colisiones más peligrosos.
Mayor probabilidad de atropellos: Acelerar en amarillo puede sorprender a peatones que comienzan a cruzar pensando que el tráfico se detendrá, aumentando el riesgo de accidentes peatonales.
Diversos estudios de seguridad vial han encontrado que los accidentes en intersecciones son comunes y frecuentemente se deben a errores de juicio en los tiempos de cambio de luces. Respetar la luz amarilla como una señal para detenerse, en lugar de acelerar, es crucial para mejorar la seguridad en estos puntos críticos del tráfico.