Veracruz | 2022-08-23
De conventos a cantinas, de lo religioso a lo mundano. Muchos monumentos históricos en la ciudad de Veracruz dieron ese vuelco al paso de los años desde los tiempos de la Colonia hasta la era moderna y muchos sobrevivieron como bares hasta hace pocos lustros, afirmó Eduardo Flores Romero, investigador del Colectivo Cultural Arqueología La Bohemia.
Al anunciar la charla ‘De lo sacro a lo profano’ que tendrá lugar este jueves 25 de agosto a las 7:00 de la tarde-noche en la cantina El Nuevo Destino ubicada en la avenida Hidalgo entre Constitución y Montesinos en el centro histórico de Veracruz, resaltó que el cambio se dio al paso de los siglos, de la religiosidad de los conventos a lo mundano las cantinas.
Sin embargo dejó en claro que en Veracruz esos espacios fueron mucho más que sitios para el alcohol, el placer y la disipación; en ellos también se daban cita desde políticos hasta intelectuales con ideas liberales y activismo social.
El investigador quien se apoya con estudiosos del Instituto Nacional de Antropología e Historia recordó que durante la Colonia española lo primero que se construyó en Veracruz fueron los conventos que albergaron a frailes de las distintas órdenes religiosas.
“Vamos a platicar de los inmuebles históricos del siglo 17 al 19 que han sido ocupados como conventos, como templos, como capillas, como ermitas, y todo lo que aquí ocurría en todo ese tiempo que abarca desde que aquí empezó a poblarse. Recordemos que Hernán Cortés llegó en 1519, pero no se pobló hasta alrededor de 80 años después.
“A partir del siglo 17 empiezan a hacer las construcciones sacras, construcciones religiosas, conventos; digamos que el primer convento que se realiza es donde actualmente es el Recinto de la Reforma y posteriormente la Catedral de Veracruz, la Ermita del Cristo del Buen Viaje”, dijo.
El investigador remarcó que en Veracruz las cantinas han sido históricamente lugares de reunión de intelectuales y de creación de movimientos sociales.
“En este mismo lugar, que es un edificio histórico (Hotel Diligencias) había servicio de cantina y aquí se sentaban también a tomarse su trago filósofos, escritores de la talla de Guillermo Héctor Rodríguez, un filósofo de talla internacional; Juan Vicente Melo, uno de los escritores más importantes veracruzanos.
“Aquí tenemos a un lado de la calle Independencia, Los Portales, donde también se realizaron sucesos importantes en la historia nacional”, destacó Flores Romero.
Resaltó que cantinas de poco menos de un siglo han sobrevivido o abren y cierran en forma intermitente porque tienen una clientela fija que sigue buscándolas. Otras sobrevivían hasta poco antes del año 2000 y cerraron después de varias décadas de operar.
Recordó que hasta hace pocos años en la esquina de Independencia y Montesinos estaba el restaurante bar ‘Cucos’; y el ‘Barricas’ en Constitución entre Independencia y Morelos, catalogado en el inventario del centro histórico como un edificio del siglo 18.
Otro es ‘La Nacional’, ubicado en Velázquez de la Cadena y Netzahualcóyotl, que es de alrededor del año 1934 y según él, de las cantinas tradicionales más antiguas.
Añadió que el ´Pénjamo’, de 1940 y ubicado en Carranza e Iturbide, sigue funcionando en forma cotidiana.
“La Nacional sigue abierta. De hecho, hemos estado entrevistando al dueño, don Manolo, hemos tenido la oportunidad, y hemos entablado una amistad con él, nos ha platicado cómo inició esa cantina (…), a ésa la tenemos ubicada como la más antigua.
“Después tendríamos que señalar a El Pénjamo; y hay otras que intermitentemente abren y funcionan. Desafortunadamente en estos 2 años muchas cantinas han tenido que cerrar la cortina. El caso más famoso seria el del Río de la Plata, que se encontraba en 5 de Mayo y Lerdo”, subrayó Flores.
Invitó a los amantes de la historia de Veracruz a acudir este jueves al bar El Nuevo Destino en la avenida Hidalgo, a la charla en la que participarán investigadores del INAH Veracruz.
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