Veracruz | 2020-04-13 | Josefina Lugo
Con la ilusión de vender, aunque sea para sacar lo indispensable y poder comer, algunos vendedores de elotes, raspados y glorias así como limpiaparabrisas que se instalan en la zona del malecón, que en estos días luce casi vacía.
Lo mismo sucede con personas en situación vulnerable, que se dedica a pedir limosna en el centro histórico de Veracruz, donde pasan muchas horas expuestas a infectarse de COVID-19, muchos de ellos son de la tercera edad.