| 2024-02-23
A Violeta un perro le cambió la vida: por accidente atropelló a un perro y aunque pagó una cirugía veterinaria, el animal murió.
Y afirma que desde entonces la dueña del can y sus familiares sostienen un acoso en su contra, que la está desgastando psicológicamente.
Así lo narra con el hartazgo a flor de piel y el agotamiento a flor de boca.
"Vengo a dar la cara sobre lo que realmente pasó".
Violeta Sánchez Martínez recuerda que el miércoles 21 de febrero, cerca de las 8:00 de la mañana, cuando salía de su domicilio en la calle Obispo, de Río Medio 3, por accidente atropelló al perro.
De inmediato lo llevó ante el veterinario, pero como perdieron tiempo buscando veterinarias a las 8:00 de la mañana, la mascota no soportó y dejó de vivir.
Destaca que nunca se negó a asumir su responsabilidad, pero fue en vano y de todos modos se pagaron los honorarios del veterinario, y los gastos funerarios que fueron de 2 mil 200 pesos, pues se cremó el cuerpo del perro.
"Nosotros en ese momento pagamos la cremación, dinero con el que no contamos porque yo voy al día a día; yo soy contadora y trabajo todos los días".
Sin embargo otro perrito de la misma dueña quedó lastimado y está pendiente su atención médica, pero Violeta está escasa de recursos.
"Me hice responsable; no me estoy negando a brindar apoyo al otro perrito; no he cerrado una conversación con la señorita Cervantes para brindarle el apoyo".
Ahora la dueña de los perros, de nombre Gabriela podría pasar de acusadora a acusada porque según Violeta, ha iniciado una campaña en su contra por redes sociales.
"Yo lo que temo es sobre mi vida porque expuso en Facebook mis datos personales, mi dirección, mi número de casa, dónde trabajo, el número de placas de mi coche, número de serie, todo. Ni a los criminales que han matado personas le han puesto sus datos; les tapan la cara", señala Violeta Sánchez.
Resaltó que la dueña de los perros pretende que ella le pague, como si no lo hubiera hecho ya, al margen de que hay pendientes económicos, que incluyen atención para el sobreviviente.
"Los 15 mil pesos que exige es según que llevó al perro a una clínica veterinaria, dice que necesita una operación, que necesita cubrir esos gastos siempre que sean ciertos, porque si me va a sacar facturas, tiene que justificar.
"Ella lo que quiere es en efectivo. Mi mamá fue a hablar con ella y la señora vio las cámaras de video. Ahora dice que se va a la instancia judicial. Por qué tiene que acudir ante la sociedad para que me acose?", cuestiona Violeta.
Por su parte Rita Esmeralda Aguilar, compañera de trabajo y de casa de Violeta, afirma que la dueña de los perros lo que quiere es dinero.
"Expuso a mi compañera en Facebook: expuso sus datos personales. Desde entonces (Violeta) ha tenido acosos por medio de internet y también en la calle, le gritan ´asesina de perros´, le dicen ´tú mataste al perro, vas a ver´ y cosas así.
Por qué hizo ese tipo de cosas si la señora es madre, tiene una hija; ahora dice que la niña tiene problemas psicológicos; la niña no estaba cuando fue el atropellamiento del perro.
Eso da pie a pensar que eso es lo que realmente anda buscando, algo económico", señala Rita.
Antes del incidente dejaban el automóvil en la calle pero ahora lo guardan, para evitar que lo dañen.
Violeta asegura que procederá legalmente.
"Mi vida está en riesgo: a diario recibo amenazas telefónicas de personas que en mi vida he conocido: que me van a matar, que van a incendiar mi carro, que van a ir a mi domicilio. En la calle me dicen que soy mataperros, que soy inconsciente", afirma, con cansancio y hartazgo.