Ciudad de México | 2022-10-18
"Vapear" es la práctica de inhalar el vapor del líquido o cera que se calienta, los cuales contienen sustancias como la nicotina, cannabinoides como el tetrahidrocannabinol (THC), cannabidiol, aditivos y aromatizantes como el propilenglicol, glicerol y la nicotina aromatizada.
Los cigarros electrónicos y los productos de tabaco calentados son promovidos como una alternativa para dejar de fumar; sin embargo, su eficacia no ha sido comprobada por el alto índice de sustancias toxicas.
Entre las sustancias más tóxicas halladas en los vapeadores está el Dimetil Éter que es una sustancia altamente inflamable, Linalol que es usado como insecticida contra moscas y cucarachas, el Alcohol Bencílico utilizado en jabones, cremas y productos de limpieza, el Propionato de etilo que causa el mal olor del sudor, el Acetato de Isoamilo que es una sustancia liberada en el aguijón de las abejas y el Mentol que facilita la conexión con las células, lo que provoca más adicción.
Por el vapeo ha aumentado el índice de personas con problemas pulmonares y, en el peor de los casos, algunas han muerto.
Los síntomas iniciales incluyen fatiga, náuseas, vómito, tos y fiebre, que aumentan hasta que falta el aire o hay una dificultad para respirar que puede llevar a la hospitalización.
Este tipo de cigarro, es aún más nocivo para la salud, pues contiene mucha más nicotina que el tabaco, aparte el acetato de vitamina E, que es una sustancia toxica.
El comercio de cigarros electrónicos en México está prohibido por la Ley General para el Control del Tabaco desde 2008. Además, a partir de febrero de 2020, se prohibió su importación al territorio nacional.