| 2024-08-27
Hubo un tiempo donde era bastante común que los estudiantes que llegaban a la secundaria o bachillerato, incluso en primaria si no contaban con el debido uniforme tenían que volver a sus casas ya que no se le permitía el acceso a la casa de estudios, pero ¿será lo mismo en la actualidad?
La realidad es que, hoy el Artículo 146 de la Ley General de Educación es claro al respecto: "La adquisición de uniformes y materiales educativos, así como de actividades extraescolares, no podrá condicionar la prestación del servicio público referido en esta Ley", señala la ley.
Básicamente el que un estudiante no cuente con su uniforme completo, no debería ser motivo para negar el acceso ya que estará comprometiendo la educación de un alumno.
Al final del día la ley en México, protege a los estudiantes de cualquier tipo de discriminación o exclusión en los centros educativos. Sin embargo, en la práctica, contravenir el uso de uniforme implica un desafío considerable, que podría escalar hasta las instancias superiores de la autoridad educativa local.
Por ello, si a un estudiante le niegan el paso a la casa de estudios por su uniforme, es decir, no portarlo, los tutores pueden proceder dando a conocer la situación ante las autoridades educativas de su zona.
Llevar uniforme escolar tiene ventajas como la promoción de la igualdad entre los estudiantes, ya que fomenta un sentido de pertenencia y facilita la identificación de los alumnos. Además, simplifica la decisión diaria de qué ropa usar, lo que puede ahorrar tiempo y reducir el estrés.
Sin embargo, también presenta desventajas para muchos, como la limitación de la expresión individual. Asimismo, los costos iniciales de los uniformes pueden ser elevados para algunas familias, que suele ser la razón más común por la que algunos estudiantes no lo llevan.
Hoy en día se trata de garantizar el acceso a la educación sin condiciones que podrían representar barreras económicas para las familias.
Recientemente, autoridades como gobiernos estatales y municipales colaboran a los padres con uniformes y útiles escolares, lo que permite una mayor facilidad para cumplir con los reglamentos escolares.
La Ley en México impide a las escuelas y autoridades discriminar y excluir a cualquier persona en los centros educativos, así como impedir su derecho a la educación.