México | 2024-08-27
La reforma al Poder Judicial impulsada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha generado un amplio debate en México. Aunque es un tema controversial, es importante comprender los aspectos clave de la propuesta para tener una visión clara y objetiva de los cambios que se proponen.
Uno de los puntos más destacados de la reforma es la propuesta de que jueces, magistrados y ministros sean elegidos por voto directo y secreto de la ciudadanía.
Actualmente, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) son propuestos por el presidente y ratificados por el Senado. La reforma propone modificar esta dinámica para que la elección sea por un periodo de 12 años, con una primera elección extraordinaria en 2025.
Otro cambio significativo es la reducción del número de ministros en la SCJN de 11 a 9, y la eliminación de las dos salas que actualmente existen, de modo que las sesiones se realizarían únicamente en el pleno.
Además, se propone que los ministros tengan un periodo de 12 años en lugar de los 15 actuales, y se eliminaría la pensión vitalicia para los ministros, ajustando sus remuneraciones al tope máximo permitido por la ley.
La reforma también busca reemplazar al Consejo de la Judicatura Federal con dos nuevos órganos: el Tribunal de Disciplina Judicial y el Órgano de Administración Judicial.
El primero se encargaría de las funciones administrativas y de control interno, mientras que el segundo sería responsable de la administración de la justicia y la elaboración del presupuesto del Poder Judicial. Estos cambios pretenden mejorar la transparencia y la eficiencia dentro del sistema judicial.
El proyecto de reforma incluye la implementación de cuatro nuevas reglas procesales clave:
En síntesis, la reforma al Poder Judicial en México plantea cambios profundos que buscan modificar la estructura y funcionamiento de la justicia en el país. Sin embargo, su implementación sigue siendo motivo de debate y análisis entre diferentes sectores de la sociedad.