México | 2024-04-24
Los fenómenos atmosféricos que impactan o rigen las temperaturas a nivel mundial son El Niño y La Niña, los cuales se originan en el océano Pacífico ecuatorial (y en la atmósfera que lo rodea) y han sido observados y estudiados por organismos de investigación durante más de un siglo.
Aunque existe una diferencia, en cierto modo son complementarios y forman parte del mismo fenómeno, esto de acuerdo con lo expresado por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), un organismo oficial del gobierno brasileño.
Los cambios en la temperatura del océano Pacífico ecuatorial tienen alcance mundial: "Tienen efectos sobre los patrones de circulación atmosférica, el transporte de humedad, la temperatura y las precipitaciones", explica la entidad.
Se espera que La Niña regrese con mayor intensidad este 2024, esto debido a que las aguas del Pacífico se han estado enfriando, según datos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés).
Esta organización estadounidense dedicada a la investigación científica predice que los efectos de La Niña podrían empezar a notarse a partir del segundo semestre de este año, tras el final de El Niño, es decir, a finales de abril.
De acuerdo con expertos, el fenómeno oceánico de La Niña es caracterizado por el enfriamiento de las aguas superficiales de la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial y por cambios en la circulación atmosférica tropical, repercutiendo en los regímenes de temperatura y precipitaciones en diversas partes del globo, incluida América del Sur.
Este evento de La Niña tiene una larga historia de influencia en el clima, esto desde su primer registro, según el INPE, fue en 1892-1893, recordando los eventos en el 2022, tras producirse en el océano Pacífico por tercer año consecutivo.
La Organización Meteorológica Mundial informó el fenómeno que dio paso a El Niño, donde las temperaturas globales alcanzaron máximos históricos, siendo el año 2023 uno de los considerados como de los más calurosos en los últimos 172 años.
Para entender estos fenómenos atmosféricos de forma más simplificada y comprender la diferencia entre El Niño y La Niña, es necesario centrarse en la temperatura de las aguas del océano Pacífico ecuatorial.
Cabe mencionar que en cuando son más cálidas que la media histórica, se produce El Niño. Lo opuesto ocurre con La Niña, que "se refiere a la situación contraria, es decir, cuando el océano Pacífico ecuatorial es más frío que la media histórica", subraya el INMET.
El fenómeno de La Niña se ha asociado a la sequía en algunas partes del mundo, como Sudamérica, por ejemplo. Pero suele provocar precipitaciones por encima de lo normal en el sudeste asiático y Australasia (zona que incluye Australia, Nueva Zelanda y Nueva Guinea), así como en otras islas de la región.
/lmr