Veracruz | 2024-08-13
En el centro cultural, Café –Té donde se realizan múltiples actividades relacionadas con la producción artística veracruzana, hay desde luego charlas sobre cine.
Una de ellas muy interesante la realizó Eduardo Flores acompañado del incansable Emilio Cuevas, donde nutrieron al público de un sinnúmero de anécdotas sobre películas realizadas en Veracruz.
La charla dio inicio con un panorama histórico acerca de nuestra ciudad y datos importantes sobre ella en alusión al centro de la otrora ciudad amurallada y Ciudad de Tablas, referenciada así por Francisco del Paso y Troncoso.
Después de las efemérides se acercaron a los clásicos: La mujer del Puerto basada en un relato del famosos escritor francés Guy de Maupasant y dirigida por Arcady Boytler y Rafael Sevilla, protagonizada por Andrea Palma y Domingo Soler ( 1934) y después la segunda versión de 1949, protagonizada por María Antonieta Pons y Víctor Junco, en ambas el trama destaca el esplendoroso malecón y los astilleros del rinconcito bañado por las olas del mar.
Los charlistas, viajaron a través de décadas haciendo hincapié en películas relacionadas con el Carnaval hasta llegar a la Fierecilla del Puerto con Irma Dorantes, 1963 y El Derecho de Nacer, 1966 en estas dos podemos detallar el boulevard y los famosos tranvías.
No obstante una de las más comentadas por ser una película premiada fue Danzón de María Novaro, protagonizada por María Rojo, Carmen Salinas y donde la Nana Goya Loló Navarro tiene una destacada participación.
Emilio apuntó una anécdota sobre María Rojo, la actriz no sabía bailar danzón y Rosa Abdalá, quien fuera el pilar de este ritmo y tradición en Veracruz, la enseñó.
Par de horas gratas pasamos asociando lugares claves de Veracruz con el cine: La Tregua, El Tiempo de las Mariposas y Romeo y Julieta, cuya estrella fue el joven Leonardo D´Caprio y documentales como los del genial creativo José Romero.
Bien por este tipo de eventos tal como señaló un asistente, pues son necesarios para revalorar el acervo de la ciudad.
Plausible labor de Efrén Rubio, empresario y promotor cultural, pendiente de la veta creativa en el entorno.