Veracruz | 2020-04-16 | Pamela Salinas
El confinamiento que se vive actualmente ha modificado el ritmo de vida en todos los sectores de la sociedad y por ello, existen diversas posturas que definen como vivir la etapa de resguardo, misma que iniciara a finales de marzo y que, debido al ingreso a la Fase 3 del COVID-19, se extenderá.
Si bien estas semanas han sido de supervivencia y adaptación, en redes sociales no solo circula información relativa a la enfermedad, sino también consejos y opciones de cómo sobrellevar la cuarentena, que van desde la actividad regular dentro de casa hasta la idea de mantener la calma y aprovechar este tiempo para reorganizar nuestros contextos.
Así, con memes que recalcan aprender ‘algo nuevo’ durante el confinamiento y otros que se burlan de esta obsesión por la productividad, consultamos en Galería a Jonathan Natarén, máster en Psicoterapia Breve y terapeuta familiar sistémico, quien aporta su perspectiva a estas posturas extremistas y brinda un punto intermedio para visualizar las mismas.
Adaptación
“Veo a esta cuarentena como una etapa de adaptación que estamos pasando los seres humanos ante una contingencia que nos abre la oportunidad de ver el mundo de una óptica diferente” –afirma- “Es una situación que pone a prueba nuestras capacidades de adaptación, supervivencia y resiliencia ante situaciones que no estamos acostumbrados a vivir y creo que todas las oportunidades, aun así sean difíciles, nos brindan crecimiento”.
Señala que la situación ha generado grupos ‘muy polarizados’ en sus pensamientos, pues hay quienes creen fervientemente en la pandemia y otros escépticos ‘que incluso han inventado ciertas teorías conspirativas un tanto paranoides’ sobre el COVID-19, lo cual distorsiona y separa a los sectores de personas que procuran evitar el contagio.
Cambios
A la par del mindset, Natharén afirma que el cambio de rutina influye en aspectos psicológicos como los niveles de sueño, hábitos alimenticios y actividad física, lo cual se ve reflejado en la productividad.
“Hay una menor ingesta de productos menos saludables y eso está produciendo cambios en el cuerpo. Hablo de esto porque también forma parte de los cambios psicológicos que se van a experimentar. Sabemos que el consumo de azúcar está muy asociado a como reacciona el cuerpo ante ciertas situaciones, entonces al tener un nivel elevado de glucosa va a reaccionar el cuerpo a algo muy parecido a una adicción, ¿y qué sucede?, que cuando tenemos un exceso de energía, lo que necesitamos es quemarlo”.
“Tal vez si me estoy durmiendo tarde, despertando tarde, no hago una actividad física, empiezo a experimentar ansiedad, insomnio, irritabilidad, depresión. Entonces son básicamente los cambios que se van a venir experimentando por tal vez la falta de liquidez económica, la falta de rutinas establecidas, la dificultad ara forjar hábitos diferentes, son principalmente esas situaciones que se están presentando”, explicó.
Novedad
Al cuestionarle sobre esta tendencia a desarrollar nuevas habilidades, negocios, entre otros aspectos sugeridos durante la cuarentena, el psicólogo aseguró que es válido que quienes sean creativos y proactivos realicen actividades que les enriquezcan de forma personal. Sin embargo, también aplaude el derecho individual de ‘pasar la cuarentena lo más tranquila posible’.
“Tal vez han estado trabajando de manera incansable durante muchos años y de pronto se están topando con esta oportunidad para reflexionar, estar en contacto con ellos mismos y poder decir ‘El día de hoy no hago nada y no solamente hoy sino toda la semana, porque así me siento bien y estoy descubriendo que esta también muy padre estar en contacto con mi cuerpo y conmigo mismo’”.
“Esta postura de que deberíamos haber leído un libro, aprendido una nueva habilidad o un nuevo idioma, es decisión de cada persona. Muchas veces crecemos escuchando que hay que cumplir expectativas de los padres, los hermanos, la pareja, la sociedad, los amigos, pero nosotros no estamos para eso, estamos para cumplir expectativas que son verdaderamente nuestras”.
Lo que sí sugirió es no perder los hábitos básicos de higiene y arreglo personal, así como el ‘ir viviendo el día a día’, ya que pensar demasiado en el futuro e incluso saturarse de información, puede llegar a generar ansiedad.
Por ello, también resalta la diversidad de opciones online para el entretenimiento y el crecimiento personal, al que le sumaría una variedad más de terapias alternativas y no alternativas de meditación, yoga o reiki, que le permitan a las personas ‘experimentar tranquilidad y manejar sus emociones’ para así evitar la ansiedad o depresión que pudieran generarse ante la evolución de la pandemia.
Comunicación
En ese tenor, subrayó la importancia de mantener la comunicación virtual con los seres queridos, pues aunque la convivencia y el contacto físico genera neurotransmisores y estimula al organismo, el contacto constante y la meditación permitirán sobrellevar esta etapa de aislamiento “que lejos de ser frustrante, sea una etapa que nos permita descubrir cosas diferentes de nosotros mismos”.
Finalmente, invitó a disfrutar el confinamiento, estar en contacto personal y abrazar el cambio, así como implementar y forjar hábitos distintos, así como otras rutinas, que permitan la actividad neuronal y física.
“Disfruten de tener esa tranquilidad o paz que quizá hace mucho tiempo no habían sentido (…) también hacer ejercicio para que nos ayude a producir cortisol, que evita la depresión y segrega endorfinas y serotonina, que nos van a hacer sentir bien”, concluyó.
“Esta postura de que deberíamos haber leído un libro, aprendido una nueva habilidad o un nuevo idioma, es decisión de cada persona (...) Estamos para cumplir expectativas que son verdaderamente nuestras".
Jonathan Natarén, terapeuta