Orizaba | 2022-09-13
El vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, reconoció el trabajo de las corporaciones de seguridad que la tarde del 12 de septiembre resguardaron la integridad de los ciudadanos ante los hechos inéditos que se vivieron.
Mencionó que esos momentos quedarán grabados en la memoria colectiva de los pobladores, sobre todo entre quienes vivieron momentos de sufrimiento por esos hechos.
"Sin embargo, a pesar de la amarga experiencia vivida por vecinos y transeúntes, resuenan las palabras del Señor: mi paz les dejo, mi paz les doy, no se las doy como la da el mundo, no se turben ni se acobarden", expresó.
El presbítero destacó que Orizaba se ha distinguido por ser una ciudad de paz y su gente también y su lema da cuenta de ello: benigno el clima, fértil el sueño, cómodo el sitio y leal el pueblo.
Destacó que en estos días en que se celebran las fiestas patrias se deben fortalecer las virtudes que unen a todos como mexicanos y como orizabeños, que son la búsqueda de la verdad y la construcción de la justicia.
Invito a la población a mantener la confianza en Jesucristo, príncipe de la paz, y a ser constructores de esa paz cada quien en su hogar, escuela, centro de trabajo, calles y colonias.
"Hagamos de nuestro país un mejor lugar para vivir y convivir para celebrar con verdadero sentido patriótico las fiestas nacionales de estos días", exhortó.
El vocero de la Diócesis hizo un llamado también a quienes difunden comunicados para que eviten generar desinformación y psicosis, y reconoció la labor de los medios de comunicación que informaron con objetividad y profesionalismo.