Zaragoza | 2021-07-19 | Mirna Hernández
La mañana de este lunes, el pueblo de Zaragoza, entre los que se contaban familiares y amistades, le dio el último adiós al pequeño Brayan Pérez Trinidad, antes de bajar a su última morada, su sepulcro en el Panteón Municipal.
Una gorra de color verde militar, una pistola de plástico con la que jugaba, una flor blanca, además de su fotografía, acompañaban el féretro, conteniendo los restos del niño, quien el pasado jueves junto con su familia acudió a pescar al río Coatzacoalcos, a la altura del puente Antonio Dovalí Jaime y en un descuido, cayó a las aguas de ese afluente, siendo su cuerpo encontrado la mañana de este domingo, por pescadores.
Jóvenes y adultos entonaron diversos canticos y pronunciaron varias oraciones, pidiendo por el eterno descanso de su alma.
Los pequeños con los que alguna vez jugó, lo despidieron con globos blancos que uno a uno caían junto a su ataúd.
Su padre, quien en el río Coatzacoalcos prometió no irse de ahí hasta llevarlo, con llanto le dio el último adiós.
Familiares de Brayan, agradecieron a todos los que participaron de una u otra forma, ya sea en el operativo de búsqueda del cuerpo, apoyando con la gasolina para las lanchas, en el transporte de los voluntarios, dando para los gastos funerarios o quienes con una oración hicieron posible que surgiera el cuerpo, entre las aguas del río para así darle cristiana sepultura.