Veracruz | 2024-05-07
La reciente serie de apagones en las zonas norte y sur de Veracruz ha suscitado preocupaciones significativas entre los residentes y las autoridades locales.
Estos cortes de energía, que han afectado a diversas comunidades y han interrumpido actividades diarias, parecen estar relacionados con una serie de emergencias en la red eléctrica nacional.
La ola de calor que azota actualmente al país ha provocado tres estados operativos de emergencia en el Sistema Interconectado Nacional (SIN), según información proporcionada por el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE).
Estos picos en la demanda de energía, alcanzados por la tarde del martes, reflejan un aumento significativo debido al uso intensivo de aires acondicionados y otros dispositivos eléctricos.
El primero de los estados de emergencia se declaró a las 16:30 horas del 7 de mayo y concluyó a las 17:04 horas. Sin embargo, no se estabilizó y se declararon dos emergencias adicionales poco después, prolongándose hasta casi las 18:00 horas.
Durante este período, la demanda de energía excedió la generación neta, que se registró en 48,403 megawatts, siendo rebasada por la demanda neta de 48,472 megawatts.
En Nezahualcóyotl, al menos 20 colonias experimentaron apagones que duraron hasta 30 minutos.
Vicente Ramírez García, titular de la Dirección General de Seguridad Ciudadana municipal, informó que los cortes se distribuyeron en zonas norte, centro y oriente, afectando incluso el funcionamiento de dos plazas comerciales y varias escuelas.
La situación fue similar en otras partes del país, incluyendo cortes en San Luis Potosí y la zona metropolitana de Zacatecas, donde la falta de energía coincidió con temperaturas extremadamente altas.
Estos cortes eléctricos han complicado la vida de los ciudadanos y puesto en riesgo la salud de muchos, especialmente de aquellos que dependen de sistemas de enfriamiento para mitigar el calor.
Los apagones no solo perturban la rutina diaria, sino que también plantean serios riesgos para la seguridad y el bienestar de las poblaciones afectadas.
La falta de iluminación y la interrupción de los semáforos pueden conducir a accidentes de tráfico y otros incidentes de seguridad pública.
Además, la interrupción del servicio eléctrico afecta a hospitales y clínicas, poniendo en peligro la atención médica que requieren los pacientes.
Las autoridades continúan monitoreando la situación y trabajando para estabilizar la red eléctrica, pero la actual ola de calor sugiere que los desafíos podrían persistir en los próximos días.
Los residentes son aconsejados a tomar precauciones, especialmente durante las horas de mayor calor y a estar preparados para más interrupciones en el suministro eléctrico.