Veracruz | 2020-11-21 | SILVERIO QUEVEDO ELOX
Parece que los asesores del secretario de Finanzas, José Luis Lima Franco le saben al tema de la mercadotecnia política.
Algo que en la Cuarta Transformación no se le ha dado como quisieran, o simplemente, es otro el modelo de hacer política, porque se basa más en las necesidades del pueblo e incluso, poco interés por la esfera mediática.
Por ello, todo indica que le salieron bien las cosas al secretario de Finanzas, José Luis Lima Franco, en su estrategia armada desde un par de semanas antes de su comparecencia ante la máxima tribuna del Estado, al tener que rendir cuentas ante los representantes populares, es decir, la Legislatura.
Y es que en este espacio se consignó en su momento cuando en este espacio del 31 de octubre se habló sobre el tema de los Tiburones Rojos de Veracruz, el propietario del equipo que hasta hace poco era el franquiciatario y del estadio Luis Pirata Fuente:
“Un detallito que podría subir de tono y convertirse en otro escandalito es el tema de comodato del estadio Luis “Pirata” Fuente en el que por lo mismo quizá, el titular de las Finanzas en Veracruz, José Luis Lima Franco no ha querido meterse de lleno.
O hay quienes dicen que procura delegar para no distraerse de los asuntos urgentes que requiere Veracruz como el pago de la deuda, garantizar las prestaciones a las decenas de miles de burócratas, y demás.
Y es que cuando los dueños el Club Veracruzano de Fútbol Tiburón pidieron el coloso del fraccionamiento Virginia ubicado en Boca del Río para jugar su temporada como local la respuesta del titular de Sefiplan sorpresivamente al que se le encargó esa chamba fue al subsecretario de Ingresos, Ricardo Rodríguez”, se dijo entonces.
Y es que precisamente no se había definido el tema, apenas estaba en la etapa de darle cerrojazo para quitarle de una buena vez el control del estadio al empresario orizabeño, que por cierto, fue uno de los que se la jugó con el ahora presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Kuri desafió al entonces gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, y prestó el estadio Luis Pirata Fuente, manzana de la discordia y del que hoy se le ha quitado de las manos al “recuperarlo” el Gobierno Estatal, y le concedió para que el tabasqueño realizara uno de sus cierres regionales en ese inmueble. Hecho que por cierto fue aprovechado por sus detractores porque no logró un lleno como se tenía planeado.
El gobernador en turno, el panista Yunes Linares imprimió presión política a los concesionarios de autobuses y muchos de ellos fueron retenidos con la gente que venía al mitin del candidato de Morena, otro factor que no ayudó y se les fue de las manos a los entonces organizadores, que realizaron el evento a la misma hora del encuentro de futbol de la Selección de México contra Corea en el Mundial de Rusia 2018, el sábado 23 de junio de ese año.
Pero ahora, precisamente a Kuri se le ha quitado la operación del Estadio Luis “Pirata” Fuente que por años mantuvo a la par del equipo en Primera División y que en el 2019 desapareció de dicha fuerza y fue desafiliado tras muchos desencuentros del exdiputado federal con los directivos de la Federación Mexicana de Futbol.
Un día antes se dio el anuncio de que le era retirada la franquicia y que además el Gobierno del Estado también volvía a tener el nombre de los Tiburones Rojos.
Este viernes en el marco de su comparecencia, y como arriba quedó asentado, los Tiburones parecen ser un rentable tema y parte del juego en la política. Hay que recordar que “para el pueblo pan y circo” y el titular de Sefiplan lo midió correctamente, y ante los medios dejó correr la idea que empresarios están interesados en instalarse en Veracruz para revivir al equipo.
No obstante, el mismo gobernador, Cuitláhuac García, aclaró que se trataría de un equipo en la Liga de Ascenso y a esperar cuando haya oportunidad para que puedan subir a la Primera División. No tanto como los espejitos que quiso vender con el tema el estratega y bien asesorado Lima Franco.