Veracruz | 2024-07-30
Al parecer el partido Morena no quiere saber nada sobre el estado de Veracruz, hasta el momento nunca ha regresado el líder nacional Mario Delgado, tampoco hubo alguna una relación con el gobierno de Cuitláhuac García y al parecer esa situación de divorcio entre las autoridades veracruzanas y la cúpula partidista seguirá de manera permanente.
Ese silencio continúa mientras que exista este gobierno estatal; ahora se maneja que el mandatario veracruzano se incorporaría al comité nacional del partido, equipo que comandará la actual secretaria de Gobernación Luisa María Alcalde.
Lo que son las cosas, hay funcionarios que cuando se retiran la ciudadanía en general lamenta que terminen su administración, pero en el caso de Cuitláhuac García da gusto que se vaya, ha llegado a ser considerado uno de los peores gobernadores que ha tenido la entidad.
Nunca se supo relacionar con los gobernados y al parecer, también padece un complejo de identidad, esa falta de comunicación también tiene un responsable y está en la persona de su vocero, el publicista Iván Luna Landa, quien mantuvo un divorcio permanente con la mayoría de los medios de información tanto del estado como los nacionales.
Lamentablemente los funcionarios públicos buscan como directores de comunicación a sus grandes amigos o recomendados, cuando deberían tener a profesionales en estas delicadas áreas de la comunicación.
A diferencia del gobierno federal donde algunos funcionarios importantes repiten en sus cargos, en el caso del estado de Veracruz se trata de una limpia total. Excepto en la Secretaría de Finanzas y Planeación, donde su titular José Luis Lima Franco repite para que le responda a la nueva gobernadora, Rocío Nahle, como se encuentra el gobierno en cuanto a deudas millonarias que no ha pagado y que la situación financiera no es nada clara y tiene que explicar que destino tuvieron esos recursos públicos que significan un elevado daño patrimonial.
Sin ninguna pena apareció el jerarca de los Yunes azules, Miguel Ángel Yunes Linares para acusar al gobernador Cuitláhuac García de no haber ejercido la fianza sobre su negocio privado más chueco, el de las cámaras de vigilancia, cuando sus dos hijos están acusados y ostentan sus respectivas órdenes de aprehensión, el señor exgobernador panista se presentó ante los medios de información como una persona ajena a los graves problemas penales que atraviesa su familia.
Se le olvida que existe un expediente azul en la Fiscalía General de la República sobre su gestión como director general del ISSSTE en el gobierno de Felipe Calderón, considerado como el peor presidente de las últimas décadas. Debe tener presente que su protector Alejandro Gertz Manero va de salida y él que vaya a sustituirlo pertenece a otro gobierno donde no existe el perdón ni el olvido.