Veracruz | 2021-09-10 | David Colmenares Páramo
La importancia de la innovación y el uso de las nuevas tecnologías es un tema que ha preocupado y ocupado a las Entidades de Fiscalización Superior en los últimos años a nivel mundial, regional y nacional. INTOSAI y OLACEFS, al igual que otros organismos internacionales como la OCDE y el Banco Mundial, han promovido la utilización de datos y la introducción de las nuevas tecnologías en la planeación y ejecución de auditorías para reforzar la innovación y la creación de valor agregado.
Por ejemplo, la ASF acorde con su Plan Estratégico, emprendió un ambicioso proceso de transformación digital. En el escenario de la emergencia sanitaria por Covid-19, consolidamos el proyecto de las auditorías digitales. Que como ya se ha mencionado, gracias al apoyo del Congreso de la Unión, que otorgó a la ASF las facultades necesarias para esta nueva modalidad; además, desarrollamos las herramientas tecnológicas que nos permitieran realizar las auditorías digitales, como el Buzón Digital. Hoy en día, ya se realizan en las Auditorías Especiales de Cumplimiento Financiero, Desempeño y Gasto Federalizado.
La utilización del Buzón Digital, sin comprometer la certeza y seguridad de la información, ayuda a reducir aproximadamente en un 30 por ciento el tiempo que se destina a integrar un expediente de auditoría. El pasado 3 de septiembre, iniciaron las primeras auditorías 100% digitales en la Auditoría Especial de Gasto Federalizado, Cumplimiento Financiero y Desempeño.
Por otra parte, el big data y la inteligencia artificial nos ayudan a planear y ejecutar nuestras auditorías con una mayor precisión y a obtener mejores resultados, en lapsos de tiempo menores y aprovechando de manera más eficiente nuestros recursos, tanto humanos como materiales. Gracias al big data, es posible revisar unos mil 500 millones de registros de bases de datos, analizar tendencias y detectar posibles operaciones sospechosas, como las contrataciones con empresas sancionadas.
La transformación digital, además, crea nuevos canales de comunicación con la ciudadanía. Por ejemplo, hace unos días, la ASF puso a disposición del público una plataforma para facilitar la presentación de denuncias ciudadanas conforme al título IV de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación, que robustece canales para que distintos actores comuniquen sus inquietudes sobre presuntas irregularidades y hagan llegar las sugerencias que pueden ser consideradas en los procesos de planeación y programación de auditorías.
Por supuesto, aprovechar las ventajas que las nuevas tecnologías nos ofrecen, implica un importante esfuerzo institucional, que implica el garantizar la integridad de los datos, así como la seguridad de la información, temas que son particularmente complejos y en constante evolución, por lo que las EFS tienen que contar con los conocimientos suficientes para analizar, en el ejercicio de una auditoría a las tecnologías de la información, la calidad de los datos y la seguridad de la información de las entidades públicas y, al mismo tiempo, garantizar estos mismos aspectos en el cumplimiento del mandato constitucional de la ASF. Por ello, en el marco del Grupo de Trabajo en Auditorías de las Tecnologías de la Información y la Comunicación de la INTOSAI, coordina el proyecto para elaborar una guía sobre ciberseguridad y protección de datos.
La ASF no puede ser ajena a la llamada “Cuarta revolución industrial” y estar a la vanguardia para aprovechar adecuadamente las ventajas y soluciones que las tecnologías de la información, el big data y la inteligencia artificial ofrece para mejorar el control de la gestión gubernamental, marcar la diferencia en los procesos de rendición de cuentas, el combate a la corrupción y facilitar la participación ciudadana, en la fiscalización principalmente en las auditorias de Estados y Municipios.
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