Veracruz | 2024-10-20
La gran polémica del descubrimiento de América, festinado como día de la raza, de la hispanidad o lo más absurdo encuentro de dos mundos, se ha ido derrumbando desde el retiro de la estatua de Cristóbal Colón de la glorieta del Paseo de la Reforma, la carta dirigida al Rey de España por el gobierno de México, para pedir perdón por las atrocidades cometidas en la invasión y masacre, nunca descubrimiento ni mucho menos encuentro, fue saqueo minero, exterminio, imposición religiosa, explotación de mano de obra.
Dicha carta fue mañosamente filtrada a la prensa internacional por Felipe VI para dejar las venas abiertas de América latina, como lo expuso en su libro Eduardo Galeano: exterminio y explotación por medio de la espada, la Cruz y los virus.
Culturas de gran prosperidad arquitectónica, astronómica, matemática, cultural como la Azteca, Maya e Inca. Los Mayas y Aztecas, como lo hicieron los fenicios, cursaban mares en sus embarcaciones para el comercio e intercambio agropecuario. Edificaciones comparadas a las egipcias, persas y romanas, construidas alrededor del lago de Texcoco, de la actual península de Yucatán y Centroamérica, o las impresionantes edificaciones en Machu Picchu.
La imposición de la religión católica, promovida de manera activa por los españoles, era la piedra de toque de su régimen político, tuvo un profundo impacto sobre las sociedades indígenas y sus formas de vida. Tradicionalmente, la cristianización ha sido vista como el lado positivo de la conquista militar. La iglesia se apropió casi la totalidad de las tierras cultivables y domesticó manipulando las conciencias de la mano de obra indígena. Peo por fortuna, las tierras y edificaciones fueron expropiadas por las Leyes de la Reforma de Juárez. Situación que bien se aborda en el filme de Salvador Carrasco, en 1999, La otra Conquista.
Las enfermedades virulentas, totalmente desconocidas en los pueblos originarios: "En 1520 empezó a esparcirse por la ciudad prehispánica de México-Tenochtitlan lo que llamaron hueyzahuatl, vocablo náhuatl que se traduce como -la lepra grande-, o -la de granos mayores-. Era la viruela, que llegó en el peor momento: se encontraban en plena batalla por defender la capital del imperio mexica, también llamado azteca, ante los conquistadores españoles. Pero se enfermaron. Y lo que fue una tragedia para unos, para otros fue una señal divina. -Dios consideró adecuado enviar la viruela a los indios y hubo una gran pestilencia en la ciudad-, relató el soldado y cronista Francisco de Aguilar. Los historiadores afirman que la viruela llevada a América en los viajes de los conquistadores desde Europa fue la primera pandemia en el conteniente hace 500 años". (BBC.News Mundo).
En los conquistadores el uso de la espada, caballos, mosquetones y vestimenta metálica se impuso a los torsos desnudos, arcos, flechas, piedras y lanzas. Masacre bien narrada en el filme de Mel Gibson, Apocalyto, realizada por cierto en la espléndida zona de los Tuxtlas de Veracruz. La violencia como eje, los excesos de las elites de poder, prevalecieron en todas las culturas desarrolladas del mundo occidental: la romana, la griega, la persa, la egipcia, la árabe, la mongol y presente en las culturas azteca, maya e inca también. Pero el exterminio fue atroz para imponer el control imperial de Castilla, hoy España, ante el mundo de Anáhuac hoy México. Las nominaciones anteriores no disculpan las atrocidades y el saqueo de riquezas mineras, agrícolas y hasta humanas. La masacre, la imposición mística de valores ajenos a su cultura y tradición, la contaminación virulenta de enfermedades desconocidas en nuestro mundo real todo influyó en que ese descubrimiento se tornara conquista para ser finalmente un exterminio de culturas ancestrales, ¿siglos antes de Cristo eh? Alejados por mares y océanos de la cultura occidental medieval europea a la cultura mesoamericana.
"Que los países europeos que pidan perdón por su pasado colonial y su papel histórico en la trata de esclavos es "un primer paso importante", pero se necesita mucho más para curar las heridas del pasado. Países Bajos se ha convertido este lunes en el último país en presentar una disculpa formal. Almaz Teffera, investigadora sobre racismo en Europa para Human Rights Watch, lo ha descrito como -un gran acuerdo-, y un primer paso importante que también sentará las bases para la rendición de cuentas de los Países Bajos y permitirá cierta reconciliación para los descendiente...Podría decirse que, obviamente, esta disculpa llega tarde, 150 años después de la abolición de la esclavitud, pero no deja de ser una señal de que las cosas van a cambiar y un cambio que ahora deberá traducirse en acción, ha añadido. Los Países Bajos se unen así a Dinamarca, Francia, el Reino Unido y el Parlamento Europeo, que han presentado disculpas o reconocido oficialmente la esclavitud y la trata de esclavos como crímenes contra la humanidad". (EuroNews).
La España actual, decadente, rechaza pedir perdón por vergüenza y culpabilidad evidente. Insiste que no era España sino Castilla. Rechaza saqueo sino apropiación. Exonera explotación por apropiación. La Castilla de entonces, nunca precapitalista siempre feudal, fue realmente el impulsor de la gran revolución industrial que se generó en Inglaterra. El oro, la plata, el cobre y todos los metales extraídos de los pueblos originarios propició el desarrollo capitalista europeo y hundió a España en el subdesarrollo histórico que jamás, ni con Franco, logró salir. Pedir perdón es de dignidad cultural y sobre todo una obligación histórica. Pero la monarquía lo evade, su gobierno lo arropa, su pueblo lo padece.
Hoy España había logrado las exequias del catolicismo decadente. Ese que acaba de pagar más de 880 millones de dólares por los excesos y abusos de sus curas pederastas, solo en Los Ángeles. Rebasan los miles de miles de millones de dólares en todo el mundo, entre ellos la América saqueada y manipulada de valores que contradicen su cultura y su origen.
El Rey Felipe VI y su alfil el seudo socialista, profranquista, Pedro Sánchez, dicen no al perdón. Pero acogen, arropan, protegen, cuidan y chiquean a tres expresidentes conservadores y sobre todo traidores a México: Calderón, Zedillo y Salinas de Gortari que les entregaron el petróleo, la electricidad, el oro (hoy a más de 2700 dls. la onza, y casi la mitad del territorio nacional), la plata y sobre todo las tierras cultivables a sus atrocidades modernas.
Esta semana se reúnen los países del BRICS y con ello el fin del mundo unipolar, para resurgir el mundo multipolar.