| 2023-08-03
“¡Te quitaré a los niños, no los verás más, les diré la clase de padre (o la madre) que eres!” Nada hay más vergonzoso que uno de los dos cónyuges use a sus hijos cuando existe una separación conflictiva.
Se emplean como armas emocionales, como venganza por los problemas ente ambos. Instrumentalizando a sus hijos como objetos para negociar, maltratar y ocasionar dolor.
Típicamente, ocurre que quien tenga la custodia, no deja que papá o mamá vea a los niños o niñas hasta que obtenga lo que desea. Es tanta la rabia, que se busca dañar al otro (a) a través de los pequeños. Y obvio que éstos, no entienden lo que pasa, sufren las consecuencias emocionales: miedo, depresión, ira, ansiedad, agresividad, frustración y potenciales intentos de suicidio porque creen que la discordia es culpa suya.
Rasgos: En este tipo de violencia afloran las mentiras, burlas, amenazas y, sobre todo, actos de manipulación, de control, de dominio, de quitar autonomía, dignidad y autoestima, actitud de “yo tengo el poder”.
Señales de alerta: Cuando él o ella en la relación es violenta, déspota, celosa o celoso en extremo. Cuando las amenazas y los insultos son pan de todos los días. Si hay descuido, indiferencia y golpes en torno a los menores, también arroja focos rojos. Es importante que cada quien esté alerta de estos indicios…y actuar en consecuencia. El mejor tratamiento en el contexto de este tipo de violencia es la prevención; saber, intuir e identificar que en caso de una separación, él o ella usarán a los chicos como armas de pelea, de perjudicar mediante ellos.
¿Qué hacer?: Estar muy pendientes, conversarlo sosegadamente, contarlo a familiares y personas cercanas, denunciar para evitar, incluso, lesiones a los hijos.
Cualquier conflicto entre una pareja, se debe resolver ahí, no fuera ni incluyendo a los hijos. Que el odio y el rencor no se anteponga al amor que sienten por ellos. Es importante que sus hijos e hijas sepan que aunque ya la relación entre papá y mamá ya no funciona, el amor por ellos está intacto y que ambos les aman y cuidan.