| 2024-07-29
La gestión menstrual es una parte fundamental de la salud y el bienestar. Es un tema y parte de los programas que fomenta el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), afirma Profeco.
El Manual sobre Salud e Higiene Menstrual del UNICEF reconoce que: "La menstruación se vuelve parte del fenómeno de reducción de oportunidades, al seguir siendo un tabú, lo que reduce perspectivas de salud, bienestar y educación para millones mujeres, niñas y demás personas menstruantes en todo el mundo".
Actualmente, existen varios productos diseñados para satisfacer las necesidades durante el período menstrual, entre los más comunes se encuentran las toallas sanitarias, los tampones y las copas menstruales.
Aún así, la UNICEF estima que el 43% de niñas y adolescentes en México prefieren quedarse en casa, que ir a la escuela durante su periodo menstrual.
Cada uno de los productos que se usan para este ciclo tiene sus propias características y diferencias, lo que permite a cada persona elegir el que mejor se adapte a sus necesidades y estilo de vida.
Las toallas sanitarias son el producto más utilizado y conocido en estos casos. Están hechas de materiales absorbentes que se adhieren a la ropa interior para absorber el flujo menstrual.
Vienen en una variedad de tamaños, grosores y niveles de absorción para adaptarse a diferentes flujos y preferencias. Algunas toallas incluyen alas para mayor seguridad, evitando que se muevan.
Este producto es fácil de usar y desechar, caracterizándose por su practicidad. Sin embargo, pueden resultar incómodas para algunas personas, especialmente en climas calurosos.
Precio aproximado: $15 a $60 (dependiendo principalmente de la marca y cantidad).
Los tampones son pequeños cilindros de material absorbente que se insertan en la vagina para absorber el flujo menstrual antes de que salga del cuerpo.
Vienen con o sin aplicador, en diferentes tamaños e incluso, variedad de niveles de absorción. Los tampones son considerados más discretos e incluso para algunas mujeres más cómodos, ya que les permite realizar actividades como nadar o hacer ejercicio sin preocupaciones.
Es importante cambiar los tampones cada 4-8 horas para prevenir el síndrome de shock tóxico (TSS), una complicación rara pero grave. A diferencia de las toallas sanitarias, los tampones no generan tanta cantidad de residuos visibles.
Precio aproximado: $35 a $55 (dependiendo principalmente de la marca)
Finalmente, tenemos la copa menstrual, este dispositivo reutilizable de silicona, goma o elastómero se ha vuelto popular en los últimos años, ya que, a diferencia de los tampones y toallas, la copa no absorbe el flujo sino que lo recoge.
La copa se inserta en la vagina para recoger el flujo menstrual; permitiendo un uso prolongado de hasta 12 horas dependiendo del flujo de cada persona.
Es una opción más ecológica, ya que puede durar varios años con el cuidado adecuado, además, no contiene químicos ni fragancias, lo que es ideal para personas con piel sensible.
Sin embargo, puede requerir un poco de práctica para aprender a insertarla y retirarla correctamente y requiere una limpieza constante.
Precio aproximado: $250 a $600 (dependiendo principalmente de la marca)
En resumen, cada producto de gestión menstrual tiene sus propias ventajas. La elección depende de factores como la comodidad, el nivel de actividad, las preocupaciones ambientales y la sensibilidad personal.
Lo más importante es encontrar el producto que te haga sentir más cómoda y segura a cada persona durante el período.