Los paseantes que llegaron al Malecón de Veracruz en martes de asueto por el cambio de gobierno de México se toparon con vientos no violentos pero sí capaces de provocar un mar picado que no permitió los recorridos en lanchas.
Con una temperatura de 30 grados, cielo nublado y vientos de 31 kilómetros por hora, algunas personas esperaban un tiempo propicio para pasear por el Malecón de Veracruz, pero aunque no entró un nortazo no era buen momento para caminar cerca del mar, por la arena que vuela y la imposibilidad de realizar paseos acuáticos en esa zona.
A simple vista se palpaba el viento arrachado que azotaba al mar contra el muro o Malecón de Veracruz y generaba un oleaje no propicio para navegar en lancha turística.
Quienes no se dejaron impresionar por el viento, que no nortazo, fueron los sacamonedas, quienes se lanzaban al mar... pero nadie les arrojaba monedas.
Pero dijeron que eso nunca los desanima porque según ellos, si no es hoy será mañana, pero alguien llegará y arrojará la moneda al mar para que se lancen y la saquen, ante la incrédulos del paseante que no se quedó frente al mar con los vientos que según ellos, sí les producía ´friecito´.
En la avenida Independencia y calles más protegidas del viento por sus edificios antiguos sí había actividad turística, sin repletar la vialidad.
"Y apenas están empezando los nortes", dijo un vendedor semifijo a paseantes que se decían sorprendidos por las condiciones climáticas del puerto jarocho.
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