Las acciones legales contra los agresores de animales van en aumento y al año 2024 se llevaban iniciados expedientes judiciales en 17 entidades federativas o estados del país, aseguró José González Martínez, presidente de la Asociación Veracruzana para la Conciencia Animal.
Admitió que los procesos toman su tiempo y si se revisa la incidencia, es baja ante una realidad muy superior pero que nadie documenta y menos si no se fortalece la cultura de la denuncia.
Dejó entrever que aunque 17 casos parecen pocos y lo son, por algo se debe iniciar y poco a poco se verán resultados.
"El año 2024 terminó mal, casi nula actividad en protección de animales; pero en el 2024 la Fiscalía logró vincular a proceso a 2 posibles transgresores de la Ley de Protección Animal.
"Ya estamos avanzando. De hecho, cerramos con 17 estados de la República Mexicana que han vinculado procesos por actos y omisiones contra los animales en materia de maltrato animal; esto ya es algo sumamente exitoso", puntualizó el activista.
No obstante, destacó que aquí los agresores no reciben su merecido porque hay mucho rezago en esa materia.
"Veracruz tiene las penalidades más bajas, de uno a 3 años de prisión, es delito no grave y hay que reformar en ese punto, pero ya estamos empezando a vincular, ya la Fiscalía ha empezado a abrir carpetas de investigación, ya ha podido vincular a algunos elementos, cosa que anteriormente no se había hecho.
"Aun con vinculaciones a proceso, las reformas a la ley como es en este caso, se logró por primera vez en la historia de México que un juez que no es de representación federal, defendiera el derecho de los animales a no ser maltratados, México ya se coloca como una de las potencias mundiales al darle esos derechos a los animales, el primero en América Latina y uno de los primeros en el mundo", recalcó González Martínez.
Añadió que en México se avanza en la protección a los animales.
"La reforma constitucional que México aprobó hace escasas semanas no solamente se endurece la sanción por maltratar a un ejemplar de compañía, sino que también va aparejada con la reforma al Artículo Tercero en la anterior Ley de Educación, a partir de los primeros pasos de la enseñanza pública.
Dejó en claro que no opcional sino obligatorio el denunciar la agresión contra cualquier animal.
"Crecimos en una generación donde los perros y los gatos eran seres con el mismo valor que una silla: 'no me gusta el perro', 'no me gusta el gato', subrayó González Martínez.
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