Vecinos denuncian esquina en colonia Zaragoza llena de basura y escombros

A ver, banda, ¿qué onda con el cochinero que traen en la colonia Zaragoza? Neta que ya parece basurero clandestino esa esquina de la calle 23 de Noviembre con Francisco Rivera Ávila. Los vecinos bien frescos, van y tiran todo lo que se les ocurre, y ahí lo dejan como si fuera un lote baldío. Que si las ramas del árbol que podaron, que si el colchón viejo, que si las llantas de quién sabe qué carro oxidado, que si los escombros de la obra que hicieron hace un mes. Todo eso lleva más de dos semanas ahí y nadie lo recoge.

Y luego no falta el clásico que pasa con su camioneta, ve el montón de basura y dice: Ah mira, aquí ya tiraron, pues ahí echo lo mío también.

Y bolas, otro montón más. Ya hasta parece que compiten a ver quién deja más mugrero. Pero lo que no saben (o sí saben y les vale) es que eso no es basura normal. Eso que están dejando no se lo lleva el camión porque no es ni orgánico ni doméstico, es puro escombro, troncos, ramas gruesas, y llantas que ni recicladas están.

Los del camión de la basura, que pasan todos los días, ven eso y ni se paran. ¿Y cómo van a llevárselo si no es su chamba? Es como si tú le pides al del Oxxo que te repare el carro. Pues no, ¿verdad? Cada quien en lo suyo. Pero aquí la raza piensa que todo lo que huele feo y estorba ya es basura y que mágicamente alguien vendrá a recogerlo. Pues no mijos, así no funciona.

Llantas, colchones y ramas se acumulan en la vía pública, afectando a vecinos de la calle 23 de Noviembre.

Y para acabarla, como nadie recoge eso, ahí se empiezan a juntar perros, ratas y hasta mosquitos. Ya se siente que si te acercas, te pica el dengue en la cara.

La neta, ya urge que hagan algo, pero también que los vecinos se pongan las pilas. No puede ser que la gente vea el montón y en vez de reportarlo o limpiarlo, vayan y le echen más. Esto no es un basurero, es una calle donde vive gente, donde pasa la gente a diario.

Así que, banda de la Zaragoza, ya párenle con el tiradero. Si tienen escombro o poda, repórtenlo, háganlo como se debe. No es mucho pedir un poquito de conciencia. Porque mientras ustedes lo ven como "nada más unas ramas", ya pasaron más de dos semanas y ahí sigue el cerro de basura creciendo como si fuera monumento.

Ya basta del "pues si todos lo hacen, yo también". Lo que se necesita aquí no es otro montón de basura, sino un poquito de vergüenza.

Vecinos exigen intervención inmediata ante el crecimiento de basura en plena zona habitacional.