Gobernador de Veracruz
En Veracruz la huesuda,
por el palacio pasó
y a Cuitláhuac muy contento
en el “sabadaba” encontró.
Con su ritmo salserón,
el buen Cuitláhuac bailaba,
pero la flaca, burlona,
con la mirada lo acechaba.
“Ya te vas, querido amigo,
es tu turno de partir,
Rocío Nahle llega domingo,
ya te vamos a suplir”.
Así el buen Cuitláhuac
parte sin mirar hacia atrás,
con su salsa y “sabadaba,”
a bailar no volverá.
Gobernadora electa de Veracruz
En Veracruz, la Catrina sonríe traviesa,
Rocío Nahle la espera, de prisa y sin pereza.
Con Morena triunfante, la gloria alcanzó,
y ahora en el estado su fuerza sembró.
Con AMLO a su lado, un camino forjó,
como secretaria de Energía a México impulsó.
Pemex y CFE en su lista dejaron huella,
una Reforma Energética que fue su centella.
Ahora en Veracruz su misión comienza,
el progreso es su lema, su mano no tiembla.
Con miras en salud y en educación,
también en turismo y en infraestructura, su gran visión.
Con firmeza en la historia, Rocío quedó,
en Veracruz su legado plantó.
La Catrina la mira y con gracia le augura:
“Que tu gobierno en la tierra sea luz y cordura.”
Exgobernador de Veracruz
En la celda oscura y fría
Javier Duarte meditaba
de por qué nadie venía
al encierro en el que estaba.
‘Ven por mí’, clama a Karime,
pero nunca ella contesta;
‘por qué tardas tanto? Dime’,
más no llega la respuesta.
Karime andaba contenta
en otro continente,
llena de “abundancia” y lujos
sin nadie que la impaciente.
Javier Duarte se desalienta
y hasta a Londres quiere irse,
pero ya perdió la cuenta,
no le queda más que reírse.
Duarte siente su presencia,
a veces cerca, otras lejana,
es una sombra que ronda,
en prisión o en su ventana.
La calaca, sin contingencia,
hoy no lleva prisa alguna,
sabe que tarde o temprano
llegará su oportuna.
Entre cuentas y pecados
lo observa con insistencia,
es ella quien decidirá
el fin, según su conveniencia.
*****************************
Secretario de Turismo y Cultura del Estado de Veracruz
Iván Martínez se va,
su tiempo en Turismo acabó,
muy risueña la Catrina
en su viaje lo acompañó.
La calaca alegre y segura
al confín se lo llevó,
estaba tan enamorada
que con Iván Martínez quedó.
“La Nena” viene a suplirlo,
pero él algo se va a llevar,
“Salsa Fest” y “Cumbre Tajín”
a la tumba los va a cargar.
Con sombrero y traje de gala,
Iván camina sin cesar,
por senderos de hueso cala
sin soltar sus fiestas al mar.
En el más allá ahora
organiza festivales como anfitrión.
Ni la muerte lo aterriza
porque es un hombre de honor.
La Catrina se lo lleva
con un ritmo pachanguero,
la gente lo aplaude mucho
y le dice “Adiós güero”.
*********************************
Patricia Lobeira
Alcaldesa de Veracruz
En Veracruz, con su eterno vaivén,
Patricia Lobeira lideraba también.
Con baches y baches al frente seguía,
mas uno profundo le cambió el día.
Iba de prisa, firme en su andar,
cuando un bache gigante la hizo brincar.
La muerte reía en la curva escondida,
esperando paciente, ¡qué bienvenida!
“Alcaldesa, ¡por fin llegaste!”, exclamó la Catrina,
“casi me rindo, ¡vaya rutina!
Tu lucha en la calle, a la gente inspiró,
pero este bache, al final, te ganó.”
Y en Veracruz cuentan entre risa y llanto,
que Patricia aún cuida el asfalto y el encanto.
Su lema eterno: “¡Va por Veracruz!”,
resuena en el viento, como una luz.
Así que cuidado, si un bache se encuentra,
pues la alcaldesa vigila, no hay vuelta.
Su misión sigue, desde el más allá,
ver a Veracruz y a su gente contenta.
*****************
Alcalde de Boca del Río
A Juan Manuel muy apurado
la calaca lo encontró,
inaugurando calles en Boca
cumpliendo con su labor.
Con pala y casco en mano,
por todo lado feliz,
donde la gente le aplaudía:
Te queremos bien aquí.
Pero un día de entusiasmo,
de filete y torito se atascó,
cayó de golpe a la bocana
y la muerte se lo llevó.
En el Mictlán sigue inaugurando
obras nuevas sin parar,
ni la muerte lo detuvo
para cumplir con su ciudad.
Juan Manuel, yo me despido
con este dulce cantar,
Dios y la Virgen te proteja
que Boca del Río nunca te ha de olvidar.
*********************************
Exsecretario de Comunicaciones de Veracruz
En una ciudad llena de encanto,
vivía un joven llamado Memo,
trabajador y siempre en su canto,
con su risa, iluminaba el terreno.
Carismático, nunca se rendía,
en cada tarea ponía su empeño,
activo como un rayo de energía,
su espíritu era puro, sin dueño.
Pero un día, la muerte llegó,
con su guadaña y su manto oscuro,
“Memo, querido, es hora, ya ves,
de dejar el trabajo y el mundo seguro.”
“¿Yo? ¿Dejar todo lo que he amado?
Si aún tengo sueños por realizar,”
dijo Memo, con voz de legado,
“mi vida está empezando, no quiero parar.”
La muerte sonrió, sin más que decir
“Tu esfuerzo y alegría te acaban de redarguir.
Te dejaré continuar en este viaje,
y se fue alejándose en el paisaje.
Y aunque la muerte no se lo llevó
su trabajo y legado siempre continuó.
Su espíritu alegre jamás se apagó,
y por muchos años más vivió.
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |