Rosario perdió la vida sola en un hospital de Veracruz

Rosario Ramos de aproximadamente 65 años de edad pasó los últimos días de su vida en completo abandono dentro de su casa ubicada en el callejón Jesús Urueta esquina Díaz Aragón colonia Ricardo Flores Magón. 

Fue la preocupación de sus vecinos la que permitió el hallazgo de la mujer de la tercera edad dentro de su casa, pero ya en muy malas condiciones de salud. Con ayuda de las autoridades fue atendida en hospitales del municipio de Veracruz, sin embargo días después falleció.

"Llevaba varios días que no habíamos sabido nada de ella ni la veíamos, fue cuando llamaron a las autoridades y al abrir la encontraron tirada en el piso. Afortunadamente la encontraron con vida y fue llevada al hospital, sin embargo unos cuantos días después nos avisaron que falleció", comentó un vecino de la difunta.

Rosario estaba prácticamente sola en el mundo, pues dijeron sus vecinos no tenía familia; su único hijo murió hace aproximadamente 10 años y tenían conocimiento de una presunta hermana mayor que vive en Ciudad de México, sin embargo no tenían comunicación.

Vecinos describieron a Rosario como una mujer tranquila y a raíz del fallecimiento de su hijo, solitaria. Sin embargo no permitieron que el cuerpo de la adulta mayor fuera a la fosa común y decidieron reclamar su cuerpo para velarla.

"Entre los vecinos se procuró traerla y velarla, sin embargo se estaban pidiendo el apoyo para darle cristiana sepultura o cremarla y al parecer son las autoridades las que iban a decidir, pero lo más probable era que fuera cremada y sus cenizas las trajera a su casa, pero no sabemos nada", expresó el vecino.

La última "voluntad" de Rosario era ser enterrada en el mismo lugar que su hijo en el panteón particular, desafortunadamente la adulta no contaba con los papeles para poder llevar a cabo el proceso de sepultura, por lo que las autoridades municipales se encargarían de tomar una decisión, la cual apuntaba a la cremación.

Rosario, fue velada en su humilde hogar entre algunas flores que vecinos y amigos del mercado llevaron para darle el último adiós.

 

Fotos: Patricia Morales. 

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