Es la temporada de tlacuaches, y saber cómo actuar si te encuentras con uno es crucial para proteger a esta especie que habita en entornos urbanos. Desde el segundo mes del año hasta mayo, nos encontramos en lo que podríamos llamar la "temporada de tlacuaches", marcada por su época de reproducción.
Los tlacuaches son parte de la fauna que los habitantes de la Ciudad de México y sus alrededores pueden encontrar. Sin embargo, lamentablemente, están rodeados de mitos que alimentan el miedo y la preocupación entre quienes se cruzan con ellos en la vida urbana.
Es importante destacar que los tlacuaches o zarigüeyas no son animales agresivos por naturaleza, tampoco son considerados plagas ni roedores. Por lo tanto, es fundamental dejar de lado estas ideas preconcebidas y conocer cómo actuar si te encuentras con uno. Aquí te lo explicamos.
¿Qué hacer si te encuentras con un tlacuache? La Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) comparte la siguiente información:
Debido a las diversas actividades agrícolas humanas, los tlacuaches se han visto obligados a desplazarse más allá de su hábitat natural. Esta situación ha llevado a que estos animales aprendan a vivir en entornos urbanos.
Cuando cae la noche y el sol ha desaparecido por completo, y las primeras estrellas comienzan a brillar en el cielo, muchos animales nos preparamos para el merecido descanso diario. Sin embargo, para otros, apenas comienza la actividad nocturna, siendo este el caso del tlacuache, un mamífero arborícola que habita en las zonas templadas y tropicales de México.
Entre todas las especies mexicanas, solo una es acuática: el tlacuachillo acuático (Chironectos minumus), que lamentablemente se encuentra en peligro de extinción debido a la contaminación de lagos y ríos, así como a la pérdida de su hábitat debido a la depredación. Este tlacuachillo se distingue por ser el único entre sus parientes mexicanos que carece de cola lampiña y prensil. En su lugar, posee membranas en las patas traseras que le permiten desplazarse en el agua.
Las otras especies comparten características similares y difieren principalmente en tamaño. Desde el diminuto tlacuache ratón (Marmosa mexicana), que mide apenas 15 cm de longitud, hasta el tlacuache común (Didelphys marsupialis), que alcanza aproximadamente el tamaño de un gato doméstico adulto, con unos 45 cm de longitud.
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