¿Por qué no se deben consumir mariscos en julio?

Uno de los alimentos más buscados en los platillos típicos de los mexicanos definitivamente son los maricos, especialmente en los estados costeros, sur y sureste del país. Además de formar parte de la dieta diaria de millones de personas.

Estos alimentos que provienen del medio acuático, específicamente de los océanos, mares, ríos y lagos, se utilizan para hacer decenas de platillos en la gastronomía mexicana.

Los mariscos son apreciados por su sabor único y su valor nutricional. Son una fuente rica de proteínas de alta calidad, así como de minerales como el hierro, el zinc y el yodo. También son bajos en grasas saturadas y una fuente de ácidos grasos omega-3, que se consideran beneficiosos para la salud cardiovascular.

Se pueden preparar y consumir de diversas formas, como crudos, cocidos, a la parrilla, al vapor, en sopas, guisos, entre otros. Son populares en muchas culturas y se utilizan en una amplia variedad de platos, desde paellas y pasta con mariscos hasta sushi y ceviche.

Es importante tener en cuenta la calidad y frescura de los mariscos al momento de consumirlos, ya que pueden ser susceptibles a la contaminación bacteriana si no se manejan adecuadamente.

Por ello, es recomendable adquirirlos en establecimientos confiables y seguir las pautas de almacenamiento y preparación seguras para disfrutar de los mariscos de forma saludable.

¿Por qué no se deben comer mariscos en los meses sin R?

En la sociedad existen creencias para abstenerse de consumir mariscos durante los meses sin la letra "r" (junio, julio y agosto) pareciendo de un respaldo científico, a pesar de su transmisión oral a lo largo de más de 40 años.

Aunque su origen exacto es desconocido, originalmente esta regla solo se aplicaba a las ostras, pero con el tiempo se expandió a todos los mariscos.

Una explicación frecuentemente mencionada es que durante los meses de verano, la ocurrencia de la llamada "marea roja" es más común. Este fenómeno se refiere a la proliferación de un tipo de alga tóxica para los humanos. El consumo de mariscos que han ingerido esta toxina puede provocar envenenamiento por mariscos.

Otra de las creencias que evita el consumo de mariscos durante los meses sin la letra "r" se originó en las décadas de 1950 y 1960, cuando el proceso de transporte de los mariscos no era óptimo, lo que llevaba a que llegaran en malas condiciones debido a las altas temperaturas.

Ante esto, se recomienda a todos los ciudadanos, consumir productos frescos, en caso de tenerlos guardados, deberán estar en refrigeración para evitar enfermedades al momento de consumir.

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