Las preferencias de los consumidores mexicanos se mantienen orientadas a autos de usos múltiples, como camionetas SUV, crossover, minivan, entre otras.
Dicho segmento concentra el 31 por ciento de la venta del mercado nacional.
En segundo lugar se encuentran los automóviles subcompactos con 28 por ciento y en tercer lugar los compactos.
Guillermo Rosales Zárate, director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores, admitió que las ventas disminuyeron a raíz de la pandemia y la mayor afectación se tuvo en los automóviles de lujo.
Sin embargo, ahora los automovilistas buscan adquirir unidades que les permitan realizar múltiples actividades.
“Todos los segmentos fueron afectados por la crisis de oferta, sin embargo, los segmentos donde mayor afectación detectamos es en los autos de lujo, los deportivos y los compactos”.
Tal es la preferencia por estos vehículos que el año pasado los segmentos de usos múltiples y de camiones ligeros fueron los únicos que registraron números positivos en la colocación de unidades nuevas.
La pandemia cambió los criterios sobre las características deseables en una unidad. Las expectativas de los consumidores se concentra más en temas de movilidad y precio.
En México, al menos el 68 por ciento de los consumidores usa su auto diario y lo prefiere como el único medio de transporte.
A diferencia de otros países los autos de motor tradicional siguen siendo los más adquiridos.
Algunas personas ya comenzaban a voltear por los motores eléctricos pero la pandemia frenó la compra de unidades y en algunos casos cambió el comportamiento comercial.
Las personas gastan en la compra de un vehículo y buscan que este les permitan realizar múltiples actividades.
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