Médicos veterinarios marchan por el bulevar Manuel Ávila Camacho del puerto de Veracruz

Este martes 18 de febrero, el gremio veterinario realizó un paro nacional para exigir justicia por el asesinato del Médico Veterinario Zootecnista Héctor Hernández Cañas, en Tultepec, Estado de México. 

La Asociación de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies (AMVEPE) de Veracruz - Boca del Río y el Colegio de Médicos Veterinarios del Estado, se unieron a la manifestación nacional en apoyo al caso de su colega fallecido, exigiendo justicia, respeto y dignificación a la profesión. 

Héctor Hernández Cañas fue acosado y asesinado el 9 de febrero presuntamente por los dueños de Mía, una perrita Yorkshire Terrier que no sobrevivió a una cirugía hecha por una obstrucción en el esófago por un hueso de chuleta. 

Partiendo del Asta Bandera, en el bulevar Manuel Ávila Camacho en Veracruz, los especialistas en medicina veterinaria marcharon hasta el acuario gritando consignas en apoyo al hoy occiso Héctor Hernández. 

Los manifestantes también exigieron a las autoridades intervenir para que se terminen las difamaciones hacia la profesión

Los manifestantes también exigieron a las autoridades intervenir para que se terminen las difamaciones hacia la profesión, así como las agresiones hacia los veterinarios. 

A la marcha se unieron médicos veterinarios en general, así como estudiantes de distintas universidades de la región. 

Héctor Hernández Cañas sufrió amenazas antes de ser asesinado 

Días antes de su lamentablemente muerte, Héctor había compartido en redes sociales detalles del caso de Mía, indicando que los dueños de la mascota conocían los riesgos del procedimiento. 

Pese a los esfuerzos del veterinario, Mía no sobrevivió debido a complicaciones derivadas de la tardía intervención de los tutores para llevarla a consulta; tras su muerte, Héctor comenzó a recibir amenazas, intimidaciones y extorsiones.

"Por el tiempo en el que tardaron en decidir si realizábamos la cirugía, en la fase de recuperación su mascota presentó una complicación durante la noche llevándola a generar un paro cardiorrespiratorio", escribió el médico veterinario en sus redes sociales. 

Los dueños de la perrita lo acusaron de negligencia médica

Los dueños de la perrita lo acusaron de negligencia médica. Poco después falleció a causa de la lesión provocada por el ataque con arma blanca del que fue víctima. 

"La negligencia no es por parte nuestra, la situación de exposición a este acto es de los tutores al dejar de responsable a una menor de su mascota, se comentó todas la situaciones que podrían presentarse durante y posterior del procedimiento de cirugía por su estado tan delicado de salud estaban ustedes al tanto que en cualquier momento por su estado podría haber un deceso", aseveró Hernández Cañas.

Según expertos y profesionales del gremio veterinario, los tutores de Mía fueron irresponsables al demorar casi dos semanas en llevar a su mascota a ser atendida, agravando su estado de salud y recuperación tras la intervención quirúrgica. 

Miles de personas han manifestado su solidaridad y apoyo a la comunidad veterinaria a través de redes sociales, exigiendo garantías para su seguridad.