Los marinos mercantes esperan que el Senado de la República no apruebe la militarización de los puertos mexicanos pero si lo hace, la última instancia será la Corte Interamericana de Derechos Humanos, aseveró Antonio Rodríguez Fritz, secretario de Trabajo de la Orden de Capitanes y Pilotos Navales.
Aclaró que no es una cuestión política, sino una situación universal, porque las terminales marítimas están para el
comercio entre países, y aunque no se soslaya a la seguridad, ésta debe estar en manos de civiles, no de fuerzas castrenses.
Recalcó que los marinos mercantes no se oponen a la seguridad, pero ésta debe estar en manos de fuerzas civiles, no castrenses.
En cuanto a las afirmaciones de que había corrupción en los puertos, cuestionó por qué no se ha detenido ni enjuiciado y sentenciado a nadie.
Dijo que la reforma que pretende el gobierno federal va en sentido contrario a la forma en que operan los países desarrollados con gran tradición marítima y a las políticas seguidas por los principales socios comerciales de México y a los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Rodríguez Fritz llamó a los senadores mexicanos a escuchar a los marinos mercantes y a no ser serviles.
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