Son muchas las historias desgarradoras que llegan al asilo Cogra, pues la gran mayoría de abuelitos son abandonados.
Y aunque sería muy difícil de recordar cada uno, hay casos como el de la señora María, dijo María Teresa Mendoza de Infanzón, directora del asilo.
Con 4 hijos económicamente bien, María fue abandonada, pues los vástagos argumentaron que no querían cuidarla.
"Su hija Lilia me dijo, ni me la traigas porque no te la voy a recibir. Uno de sus hijos, acompañada de ahora su difunta esposa, la sacaron a empujones de su propia casa", compartió la directora.
María falleció y un tiempo después, cuenta, fueron dos de sus hijos y unos hermanos a buscarla. Teresa Mendoza, narra haber sentido mucho coraje, sin embargo, lo único que les dijo fue que el daño no se lo hicieron a ella (la directora de Cogra) si no a su madre que pasó los últimos días esperando a que la visitaran.
Angelina es otro de los lamentables casos, pues desde hace 20 años, espera con ansias volver a ver a sus hijos, mismos que la abandonaron.
"Tenemos también el caso de Angelina, ella tiene más de 20 años viviendo con nosotros. Fue abandonada abajo del puente de Boca del Río. Sus dos hijos también ya son adultos casados y no la han visitado para nada desde aquella vez que la dejaron."
Por si fuera poco, el dolor de sufrir un abandono, Angelina sufre ataques epilépticos y aunque debido al padecimiento ya solo tiene el 40 por ciento de su capacidad mental, la encargada del asilo afirmó que sigue llorando después de tantos años porque dice que nadie la quiere.
María Teresa Mendoza de Infanzón, señaló que le ha tocado ir a recoger adultos mayores tirados en un cuarto abandonado con condiciones realmente precarias.
Y aunque dijo que las que más sufren son las abuelitas, subrayó que ambos merecen respeto.
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