El pueblo mexicano debería acostumbrarse a ejercicios democráticos como la consulta ciudadana para expresarse sobre diferentes temas y no dejar que los gobernantes decidan solos el rumbo de la nación, aseveró Juan Miguel Góngora Sohle, coordinador regional del Partido del Trabajo en Veracruz, Boca del Río y Medellín.
Ante las críticas a la Consulta Popular México 2021 que se realizó el domingo 1 de agosto en todo el país, resaltó que la izquierda y en particular el PT han luchado por la democracia participativa, pues la democracia representativa ya no es suficiente para las sociedades actuales, que ya no son pasivas sino proactivas.
En su opinión, lejos de desalentarse porque el porcentaje de participación no llegó al 10 por ciento, el ciudadano común debería acostumbrarse a ese esquema y en lo sucesivo demandas que se le consulte y no se decida por él.
“Es nuestro deber y nuestra responsabilidad ejercer ese derecho por el que hemos venido luchando históricamente a través de los años. Todo mundo cuestiona las decisiones del presidente y la derecha particularmente se ha encargado de querer venderle al pueblo la idea de que la figura del actual presidente es la figura de un dictador.
“Entonces, al momento de aplicar la ley tiene que ser muy cuidadoso de no caer en ese juego. Si él aplica la ley, la derecha va empezar a decir que sí es un dictador enfermo de poder al que no se le puede decir nada ni ir en contra de él”, subrayó Góngora Sohle.
Recalcó que la consulta ciudadana es una herramienta fundamental en una sociedad a la que los mandatarios jamás le piden opinión y hacen lo que quieren con el apoyo de legisladores que levantan el dedo sin pensar en los habitantes de los distritos electorales a los que dicen representar.
Eso ha pasado con reformas legislativas que convalidaron el saqueo de la nación, y los representantes partidistas callaron en su momento, indicó el petista.
Por eso insistió en que la ciudadanía no sólo debería acostumbrarse a ejercicios como el del domingo 1 de agosto, sino exigirlos y hacer escuchar su voz, sin temor a la crítica. Pero la autoridad deberá cuidarse de no dejar rendijas por las cuales se cuele el oportunismo político.
“El sentir general es que los expresidentes sí vayan a juicio, pero hay que tener cuidado en las formas, porque las formas son lo que puede generar que haya mayor descontento, y la derecha puede tener el resultado que busca si sabe cómo jugar sus cartas.
“Para mí, la ley sí se debe aplicar, pero en este caso particular la decisión es del pueblo y ante una decisión que puede llevar al presidente a ser considerado como un dictador y un tirano, él hizo lo que está en la Constitución: que el pueblo decida, que el pueblo ejerza su soberanía”, puntualizó Góngora Sohle.
Hizo hincapié en que la democracia representativa ya no funciona y así se observa en todo el mundo, donde la ciudadanía reclama que la tomen en cuenta en las grandes decisiones, no ser una simple espectadora.
A eso le temen los críticos, subrayó.
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