Es un “gigante” de aproximadamente cinco metros de altura, los filos de sus ladrillos, losetas, losas y trabes de madera parecieran ser los “dientes” y “colmillos” que amenazan devorar las pequeñas construcciones que están a su alrededor, así como a la gente que vive en ellas.
Se trata de una de las muy viejas casas del Patio Hidalgo del viejo barrio de la Huaca en el Centro de la ciudad de Veracruz, cuentan los vecinos, tiene ya más de 100 años de ser construida, es estilo losa catalana, utilizado en los primeros años de la conquista hasta la colonización.
El pasado lunes 24 de mayo, alrededor de las tres de la tarde la pared lateral que da hacia el patio se reblandeció por la lluvia y se vino abajo cayendo sobre el techo de lámina de una pequeña vivienda, golpeando a Paulina Reyes Pineda, de 44 años de edad, en la cabeza, espalda y brazos, causándole inflamación en el cráneo.
Su hijo, un joven de 18 años, salió ileso gracias a que las dos paredes de la pequeña vivienda alcanzaron a detener la pared caída, Paulina fue dada de alta al siguiente día quedándose ella, su esposo y su hijo sin casa.
Amenaza latente
Pero no todo termina ahí, este “monstruo” del patio ubicado en Manuel Doblado entre Primero de Mayo y Gómez Farías en la colonia Ricardo Flores Magón amenaza con terminar de derrumbarse, pues otra pared que da al interior del patio y la trasera que da hacia otra casa, a simple vista se ve que no aguantará más.
“Los elementos que se encuentran abajo como trabes de apoyo, debido a su podredumbre, terminan por vencerse y colapsarse al no poder cargar más la cantidad de acabados que tiene encima del entrepiso, o sea, lo que es la loza de arriba que es el primer piso, por eso terminan venciéndose”, estima a simple vista el arquitecto Cristopher Zaragoza.
La añeja construcción deja ver su “esqueleto”, trabes desgastados de madera vieja y podrida; polines y travesaños pudriéndose y un techo “carcomido” e incompleto que amenaza con venirse abajo pronto.
“Eso no aguanta más una tormenta eléctrica, un Norte de más de 100 kilómetros por hora y ya se vienen las lluvias, en este callejón pasa mucha gente, cuando a mí me cayó iba pasando gente, les pudo haber ido mal, ahora, imagínate un temblor y no la contamos más”, expresa Paulina Reyes quien gracias a una puerta, salvó la vida mientras se bañaba.
No es la única
Paulina y su familia dicen que representantes del Gobierno Municipal asistieron al lugar de los hechos, así también personal de Protección Civil que tomó fotos, hizo un reporte y dijo lo enviaría a gobernación pero hasta la fecha no les han dado solución.
La familia vive momentáneamente en casa de uno de sus vecinos, sin embargo, la situación no es exclusiva del Patio Hidalgo.
Adelante por la misma calle rumbo al bulevar, en el Patio San Antonio, hay una casa grande de madera que también tiene décadas, y en su techo algunas láminas penden de clavos o tornillos, aunque los vecinos aseguran que a esas casas la lluvia no las merma, siempre y cuando se les dé mantenimiento.
El “monstruo” del Patio Hidalgo pide a rugidos que Protección Civil municipal inicie un operativo de detección de casas en la misma condición: de posible derrumbe, antes de que se concrete una tragedia.
Barrio histórico
8 manzanas
14 patios de vecindad
85 fachadas
*Construcciones datan del siglo XVII.
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