Flor Garduño presenta la exposición La Construcción del Instante en la Fototeca de Veracruz

Muchas comunidades étnicas en América Latina enfrentan además de pobreza, el flagelo de la delincuencia, y muchas mujeres sobreviven esa situación solas, mientras los esposos trabajan fuera de sus comunidades y hasta de su país, señaló Flor Garduño, fotógrafa que lleva décadas en escenarios así, en cualquier parte de América.

En el marco de la Exposición La Construcción del Instante, en la Fototeca de Veracruz, hizo hincapié en que la mujer es parte fundamental de su obra gráfica, pero sus experiencias en comunidades autóctonas de México y Bolivia le permitieron otra visión de otras mujeres.

"He trabajado con la imagen de la mujer, pero antes estaba acostumbrada a moverme sola en mi carro en Veracruz y la sierra, los altos. Iba y venía sola, pero ahora ni loca: hay violencia, y muy arriesgada. Las mujeres, de siempre hemos tenido que sufrir muchas vejaciones”.

"Todo lo que he visto: todas las mujeres indígenas, las diferencias en torno a los temas de las mujeres, se ha profundizado por la cuestión de los narcos, la diferencia entre el hombre y la mujer es de antaño, no es nueva, es de antaño, y ahora con la cuestión del narcotráfico y eso, toda vía es más profunda esa situación, paso a paso se ha ido acrecentando", señaló Garduño.

Recalcó que el problema de las comunidades más pobres en zonas indígenas empeora con los temas del narcotráfico y por eso todavía es más profunda esa situación con las mujeres.

NO ES CULTURAL

La fotógrafa mexicana dejó en claro que esa problemática de pobreza, ahora empeorada con la presencia de grupos que viven fuera de la ley no tienen nada que ver con temas culturales.

"No es cultural, es una cuestión del día a día, que se ha transmitido de generación en generación. Eso no es cultura, eso no es cultura: es una cuestión de interés de parte de los hombres porque viene cómodo. He estado en zonas indígenas, en Bolivia, por ejemplo, en pleno siglo 20, en donde todos los hombres han emigrado y las mujeres se quedan ahí con los hijos y van a buscar un poco de metal, centenaria, y los hombres no regresan”.

"Eso no es algo cultural, es una cuestión de vida. Pero yo creo que, si hubiera un poco más de conciencia de parte de los gobiernos y de parte de la educación que los gobiernos pudieran poner, difundir, escuelas... en las escuelas hay que cambiar ese tipo de educación. No es cultura, es educación", puntualizó Flor Garduño.

Esa exposición se inauguró en el 2017 y ha pasado por todas las Casas de Cultura.

"Ha sido vista y es lo más impresionante para mí, que las fotos se vean, estas fotos de vida no son nada si no son vistas. Cada exposición la hago con alegría porque les doy posibilidad a las imágenes de vivir y de decir algo", subrayó la fotógrafa que inició hace décadas con Manuel Álvarez Bravo.

Consta de 69 piezas en las que la mujer es fundamental.

"Yo no intento proyectar nada, no intento nada. Yo pongo mi trabajo... que sean vistas, y algunas personas ven la vida de las comunidades”.

"A lo largo de mi carrera he trabajado con varios temas: la vida de las comunidades de América Latina, de México, sobre todo los Altos, donde todavía hay una preservación más viva de las culturas antiguas, los sincretismos de las dos culturas: la indígena y la hispánica y salen cosas muy interesantes. Está el tema de las mujeres en general", expresó Flor Garduño.

La exposición se encuentra en la Fototeca de Veracruz, en el Zócalo, y sus últimos días serán este sábado y domingo.

Cabe señalar que su fotografía se ha expuesto en foros nacionales y extranjeros, y forma parte de colecciones públicas y privadas de México, Estados Unidos, Argentina, Colombia, Bélgica, Francia, Alemania, Israel, entre otros países.

Su contenido es la búsqueda femenina, y retrata a la gente del país, en blanco y negro.

/lmr